Héctor Jiménez / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. La Arquidiócesis de Morelia ha ubicado al menos a 100 personas desplazadas, tanto niños de Chiapas como adultos de origen centroamericano, que se han asentado y piden dinero en cruceros de la capital michoacana, y si bien han aceptado algunos apoyos de la Iglesia también han presentado barrera, según se cree, por miedo a ser detenidos o deportados por las autoridades. El encargado de la Pastoral de la Movilidad Humana, Oscar Rojas, hizo referencia a una investigación periodística de La Voz de Michoacán, con la que se reflejaba que algunos de los niños que piden dinero en cruceros de Morelia son traídos por adultos de Chiapas. Añadió que sí han entrado en contacto con ellos para darles apoyos, pero cambian su ubicación después de unos días. “Hubo un reportaje de parte de La Voz de Michoacán donde nos hacía ver directamente a los niños que están en los semáforos de los diferentes puntos de la ciudad, pero es una situación un tanto delicada en tanto que nosotros hemos ido a apoyarlos, a brindarles alimento, atención, cobijas, chamarras, tratando de ayudarlos. Pero al paso de los días vemos que cambian y no podemos ubicarlos”. Respecto a la cantidad y situación de estos menores de edad, dijo que “Nosotros los vemos solos, pero considero que no lo están” y se estima que son unas 100 personas asentadas en la ciudad bajo estas condiciones. En los avances para apoyar a estos grupos, los religiosos observaron que se presentaban “barreras” por temor a ser presentados ante las autoridades. “Identificamos alrededor de 100 personas siempre en situación de movilidad, no en el mismo lugar, no en la misma ubicación. Son niñas y niños que, podemos decirlo, vienen de Chiapas y el tema es la vulnerabilidad no solo por la pandemia, sino que es acarreado desde hace tiempo”. “Siempre es la situación de búsqueda de mejoría, son persona que están pidiendo dinero, pidiendo apoyo a las personas que transitan, pero cuando tratamos de acércanos siempre hay una resistencia. No sé si se tratara en la línea de que nosotros vamos a ofenderlos o hablar de ellos a las autoridades para que los detenga, por lo cual ellos siempre tienen un barrera y siempre están a la defensiva”. De forma similar, Miguel ángel Gaona Pineda, encargado de la Pastoral Social y la asociación Cáritas Diocesanas, comentó que también se han ubicado en cruceros de la ciudad a personas de origen centroamericano o afrodescendientes, que también se mantienen bajo una modalidad de pedir dinero pero han evitado revelar más información sobre su origen o sitio de residencia para evitar ser deportados. “Saben que también hay presencia de hermanos haitianos o de origen afro en algunos cruces o cerca de la vías, nos hemos acercado por parte de Cáritas pero igualmente no han querido revelar dónde viven, dónde están, por la misma condición de que a lo mejor piensan que los vamos a denunciar o va a haber una deportación. Entonces solamente se les da ayuda, pero sí nos hemos acercado a ellos y sí hay también presencia de esos hermanos en la ciudad”. Migración también dentro del estado El titular de la Pastoral de Movilidad Humana contrastó que, así como se observa un fenómeno de personas migrando a otros estados o el extranjero en busca de mejores oportunidades, también se cuentan con estadísticas de las personas que arriban a municipios michoacanos por causas tan diversas como la familia, el trabajo, el estudio y la inseguridad. Respecto a las diferentes causas de migración, 61 por ciento de las personas que migraron a Aguililla fue para “reunirse con la familia”, 41 por ciento a Los Reyes para “Buscar trabajo”, 25 por ciento a Chucándiro porque “Se casó o unió”, 20 por ciento a Morelia para “Estudiar”, 17 por ciento a Zamora por “cambio u oferta de trabajo” y 12 por ciento a Huetamo por “Inseguridad delictiva o violencia”. “Podemos observar esta estadística de darnos cuenta cuál es el porqué nuestros familiares y la sociedad de Michoacán sale a buscar beneficio y refugio en otro país y no hablar únicamente de la situación en Estados Unidos, sino de la situación interna hacia los estados o las ciudades, de acuerdo a la situación y la vulnerabilidad de las personas”, concluyó.