Agencias / La Voz de MichoacánTokio. Los seis puntos de ventaja que Francia tomó en el cierre del tercer cuarto presagiaron lo que hasta hace poco parecía imposible. Para encontrar una derrota del básquet de los Estados Unidos en los Juegos Olímpicos hay que retroceder 17 años. No se veía algo semejante desde el 27 de agosto de 2004, cuando la Generación Dorada provocaba uno de los más estruendosos resultados de la historia del básquet olímpico. Y ahora fue Francia el que volvió a derribar al gigante (lo venció por 83-76) en el comienzo del Grupo A del torneo de básquet de Tokio 2020. Un triple de Fournier a 59 segundos del final puso a Francia al frente por 76-74. Kevin Durant y Draymond Green fallaron sus tiros en el siguiente ataque. Con el miedo a perder, fue todo desesperación. Cortaron con falta sobre Nando De Colo, que metió dos libres y estiró la ventaja a cuatro puntos (78-74). Una falta antideportiva de Kevin Durant, que tuvo que dejar la cancha a 17 segundos del final, decretó el triunfo de los europeos. Ese 62-56 en el cierre del tercer parcial, cuando los Estados Unidos había dominado el resto del partido, revivió los fantasmas de Atenas 2004. Es que desde que los NBA comenzaron a representar a Estados Unidos en Barcelona 1992, arrasaron de manera invicta con todas las medallas de oro en los Juegos Olímpicos. Ganaron seis títulos sobre siete torneos. Sólo perdieron con Ginóbili, Scola y compañía en Grecia, donde se tuvieron que conformar con la medalla de bronce. Las razones de la caída Estados Unidos tuvo algunos problemas en su preparación. Para empezar, la temporada de la NBA se extendió más allá de lo normal por la pandemia de coronavirus, por lo que la mayoría de sus jugadores estuvieron activos hasta muy cerca del comienzo de los campamentos de Las Vegas, donde Gregg Popovich tuvo la primera oportunidad de reunir a sus jugadores. Los amistosos debió jugarlos sin tres de sus figuras, que llegaron a la final en busca del anillo: Devin Booker, de Phoenix, y Khris Middleton y Jrue Holiday, del campeón, Milwaukee. Además, Zach Lavine, por ser contacto estrecho de una persona contagiada, debió demorar su viaje a Japón. Ya en los amistosos sufrió dos impensadas derrotas ante Australia y Nigeria, pero luego se recuperó con triunfos sobre la Argentina y España. Es decir que en los entrenamientos en Tokio, el equipo sólo tuvo ocho jugadores. Ni siquiera tuvo para armar enfrentamientos de cinco contra cinco. Los últimos jugadores llegaron a la capital japonesa apenas 12 horas antes del comienzo del partido con Francia. Y si se mira el plantel de figuras de la NBA no hay dudas de que es un candidato a ganar la medalla de oro. Pero la falta de rodaje y cohesión que le hace falta para adaptarse al básquetbol FIBA, lo convierte en un equipo con grietas ante potencias como Francia. Un comienzo sólido, un desarrollo con dudas Con una defensa muy intensa y los aciertos de Damian Lillard desde los 6,75 metros en el arranque, Estados Unidos se sintió cómo en el juego. Además, Bam Adebayo dominó a Rudy Gobert bajo el tablero y le anotó con facilidad. Así sacó una luz de ventaja el equipo norteamericano en el arranque del tercer cuarto (47-37). Pero entonces Kevin Durant cometió su cuarta infracción. En lo anímico sintió el golpe el equipo de Popovich. Francia empezó a enredarlo en la defensa. Evan Fournier tuvo una noche inspiradísima (28 puntos) y ya no dejó correr a su rival, que no volvió a encontrar tiros fáciles. Nando De Colo (13 puntos) y Rudy Gobert (13), lo escoltaron en la gran victoria francesa. Por el lado de EE.UU. sólo Jrue Holiday se destacó (18 puntos). Kevin Durant (10), sufrió por las faltas y poco pudo hacer.