Arturo Molina / La Voz de Michoacán Crece cifra de menores en condición de orfandad por los feminicidios y homicidios de mujeres en el estado de Michoacán. Con el incremento de las tasas de violencia a las que se enfrentan las mujeres, las víctimas “indirectas”, cada día son más. Las cifras compiladas por el Gobierno de Michoacán al inicio de este 2021, revelaron poco más de 80 casos de menores que perdieron a sus madres tras ser asesinadas, no obstante, a 4 meses de que concluya el año, la cifra ya supera los 120 registros, un incremento de casi el 40 por ciento en cuestión de meses. A nivel nacional se tiene estimados más de 800 casos de menores en condición de orfandad derivado de los feminicidios, lo que representa que el estado ostenta que el 10 por ciento del universo total de casos confirmados estarían presentes en nuestro estado. Al respecto, Claudia Elena Padilla, titular de la Secretaría de Igualdad Sustantiva y Desarrollo e las Mujeres Michoacanas (SEIMUJER), explicó que el objetivo del mecanismo es visibilizar a los menores como víctimas directas de la violencia feminicida. “Desde la secretaría se creó un protocolo para hijas, hijos y adolescentes víctimas indirectas, pero yo creo que son víctimas de homicidios dolosos y feminicidios. Tenemos ya apoyados 15 menores apoyados para qué resignifiquen la pérdida de su mamá. Ellos fueron testigos y testigas de la violencia que sufrió la mamá, e incluso del homicidio de sus madres. Es importante poder iniciar un proceso de la perdida en donde puedan tener recursos emocionales para llevar toda esta situación”; explicó. Cada año cerca de 200 mujeres son asesinadas, mientras que se estima que hasta un 60 por ciento de las víctimas mortales de la crisis de violencia son madres de uno o más hijos, por lo que el fenómeno tiene un impacto doble negativo en el tejido social y la afectación a los núcleos familiares. Son regiones como Zamora, Uruapan, Lázaro Cárdenas y Morelia, en donde se han detectado más casos de menores que perdieron a sus mamás tras un homicidio o un feminicidio, por lo que ahora se trabaja para protegerles tanto en términos psicológicos, económicos y formativos. Ha crecido la cifra, estaremos alrededor de 120 niños a los que se ha transcurrido en estos años. Principalmente tenemos regiones como Zamora, Morelia, Apatzingán donde lamentablemente hay perdida de la vida de las mujeres. Compartirles que estos años han sido muy complejos y lo serán para quienes lleguen en próximos años”. Claudia Elena Padilla, titular de la SEIMUJER. Si bien la mayoría de los menores se encuentran resguardados con sus familiares, principalmente del lado materno, se ha reconocido la urgencia de tomar medidas para la protección de las víctimas indirectas y tener censos más actualizados, ya que se reconoce que es un tema al cual se le había prestado poca atención y el número de huérfanos de la violencia es muchísimo mayor de lo prospectado. Se estima que hasta un 80 por ciento de los agresores de las mujeres son sus propias parejas sentimentales, por lo que, al cometer el homicidio de la mujer o el feminicidio, en los casos que se logran judicializar, los menores también pierden al padre al quedar este último en un proceso judicial y en prisión. Desde la emisión de la alerta en 2016, ya son más de 600 mujeres las que han perdido la vida de manera violenta. Uno de los puntos que más afectado a los hijos de las víctimas es que en muchos de los casos incluso han sido las parejas sentimentales, el padre de familia o padrastro, los que han atentado en contra de la vida de la mujer, por lo que la pérdida de ambos padres afecta en mayor grado. Si bien los casos de feminicidio se cuentan por decenas, los casos de homicidios se cuentan por cientos en los últimos años y siguen aumentando la incidencia en cada una de las ciudades en donde se decretó la alerta por las autoridades federales y estatales. HUÉRFANOS Y VIUDAS DE LA CRISIS DEL NARCO, EN EL OLVIDO Luego de años en que la crisis de inseguridad se ha agudizado en las regiones de Tierra Caliente de Michoacán, no existe información tangible sobre cuantos menores de orfandad han quedado por lo “ajustes de cuentas” y la guerra que se vive en la región desde hace más de una década entre grupos delincuenciales. Gregorio López Jerónimo, conocido en la región como el Padre Goyo, han denunciado que los huérfanos de la crisis se han convertido en la carne de cañón de los grupos delincuenciales ante la falta de oportunidades y e incluso de oportunidades. En total, se estima que habría más de 5 mil huérfanos y viudas que ante la falta de oportunidades, terminan por sumarse al círculo vicioso de la delincuencia por lo que, entre las asociaciones de la sociedad civil de la región, han emprendido acciones para rescatarles; “La Tierra Caliente se transformó en un basurero humano y ahora estamos dándole seguimiento. Los huérfanos son la carne de cañón del crimen organizado”. En voz de Circe López Ríofrío directora de Humanas Sin Violencia A.C, distintas regiones del estado, como en el caso concreto de los municipios de la región de tierra caliente, las mujeres quedaron en medio de la lucha de grupos delictivos. A lo anterior, se suman condiciones socioeconómicas que han dejado en condiciones de vulnerabilidad a las mujeres en muchos de los casos. Muchos de los casos sí tienen un asunto dónde las mujeres sí fueron asesinadas por el crimen organizado. Cuando está esto muchas veces no participa la familia y los procesos de investigación se vuelven más complejos. De los homicidios de mujeres parece que un 60 por ciento está en función de este contexto de los grupos delincuenciales”. Padre Goyo.
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