EFE / La Voz de Michoacán Ciudad de México.- El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, prometió este lunes que habrá justicia para José Eduardo Ravelo, un joven de 23 años presuntamente asesinado y violado por policías de Mérida, Yucatán, en el sureste del país. "Que se castigue a los responsables, incluso a las autoridades que estén encubriendo este caso, si se demuestra, si se comprueba, que hubieron estas violaciones graves que llevaron hasta el homicidio, hasta el asesinato de este joven", dijo en su rueda de prensa diaria. Policías de Yucatán detuvieron a José Eduardo el 21 de julio y tras el arresto pasó cuatro días en cuidados intensivos en un hospital, donde le detectaron un pulmón perforado y desgarres en su ano, según ha denunciado su madre, María Ravelo. Pero el 13 de agosto cuatro agentes acusados quedaron libres porque el juez afirmó que no hay pruebas suficientes. El alcalde de Mérida, el derechista Renán Barrera, ha justificado la detención del joven, originario del estado de Veracruz, porque "estaba intoxicado" y por "alteración del orden pública", al asegurar que no había evidencia de abuso policial. Sin embargo, el fin de semana arreció la polémica al difundirse un vídeo de su detención en el que seis policías someten a José Eduardo e, incluso, uno coloca su rodilla sobre su pecho mientras está en el suelo. Ante las crecientes críticas, agrupadas en el movimiento #JusticiaParaJoséEduardo, López Obrador instruyó a la Secretaría de Gobernación (Segob) para atender el asunto. "Que se vea la posibilidad de que el Gobierno de la República, el Ejecutivo federal, presente una denuncia ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para que no se quede en el ámbito local este asunto y que se vaya al fondo", sostuvo. Grupos LGBT se han movilizado por el caso aunque José Eduardo no se identificaba abiertamente como homosexual.