Angélica Ayala / La Voz de Michoacán Pátzcuaro, Michoacán. En un hecho sin precedentes, las instalaciones del Centro Regional de Educación y Capacitación para el Desarrollo Sustentable (Credes) fueron tomadas por los trabajadores, quienes denuncian malos tratos y discriminación de la directora de dicha dependencia, María Elena Páramo. En su manifestación, los inconformes señalaron que no se retirarán del lugar hasta que haya una mesa de diálogo presencial, ya que las autoridades federales y estatales realizaron una videoconferencia con los manifestantes, sin lograr un acuerdo. Es de mencionar que el Credes depende de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) del gobierno federal. Héctor Gutiérrez Soto, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría del Medio Ambiente en Michoacán, dio a conocer que la manifestación afuera del edificio del Credes “es para que paren los malos tratos y la discriminación a nuestros compañeros, que han venido sufriendo por parte de la doctora María Elena Páramo. Ya es insostenible esta situación porque la doctora no se presta al diálogo”. Foto, Angélica Ayala. En voz de su líder sindical, dieron a conocer que los cinco trabajadores del Credes son gente de trabajo y que, en todos sus años de servicio, algunos con más de 28 años, nunca habían tenido un problema de esta índole. “Estamos aquí en Pátzcuaro para apoyarlos, porque ellos no están solos, tienen al sindicato de su lado y no nos vamos a ir hasta que tengamos una reunión presencial y no virtual para que las autoridades conozcan la versión de los hechos por los afectados”. Detalló que este miércoles se realizó una reunión virtual con el delegado estatal y personal de las oficinas centrales de la Ciudad de México; sin embargo, no hubo la atención de escuchar a los afectados. “No llegamos a ningún acuerdo porque no pueden escuchar sólo una versión, si quieren una solución salomónica deben escuchar a ambas partes. Por lo que vimos y dijeron, la doctora está muy protegida por la gente de la Ciudad de México”. Entre las irregularidades que ha cometido la directora, dijo, es que obligaba al personal a realizar el aseo de su casa, así como recoger a sus hijos de la escuela, y “cuando los compañeros empezaron a negarse, iniciaron los malos tratos y la discriminación hacia ellos. A quienes se encargan del jardín y el mantenimiento les quitó un cuarto donde se cambiaban las botas y les servía para guardar sus cosas, también se los quitó”. Foto, Angélica Ayala. En otra ocasión, obligó a la secretaria a entregarle las llaves de las oficinas y “le ordenó retirar todas sus cosas personales de la oficina, sin ningún motivo”. Debido a la pandemia por la COVID-19 y ante el decreto de no asistir a trabajar, “pues la tensión se calmó porque no se veían; sin embargo, ahora que ya regresan los compañeros se enfrentan nuevamente con los malos tratos de la directora”. Gutiérrez Soto mencionó que también hay una actitud de discriminación hacia sus compañeros que son originarios de comunidades indígenas, como Santa Fe de la Laguna, Chupícuaro y Janitzio. “Mis compañeros son gente sencilla, de trabajo, nunca han tenido ningún problema en su centro de trabajo, hasta ahora que han sufrido discriminación de la doctora al no tener una buena relación laboral con ellos”. Foto, Angélica Ayala. Durante la reunión virtual, informó, la titular del CREDES, María Elena Páramo, negó todas las acusaciones; sin embargo, no hubo lugar para escuchar a los afectados. “Estamos aquí desde el pasado lunes, y nos vamos a quedar hasta que tengamos la mesa de diálogo presencial y que escuchen la versión de los compañeros, porque todos coinciden en que hay malos tratos y la discriminación que han sufrido por la directora. Deben de ser escuchados”. Aclaró que tampoco se buscará trasladarlos a otro centro de trabajo, “¿por qué ellos se deben de ir cuando tienen ya muchos años trabajando en este lugar?”. Cabe señalar que se buscó a la doctora María Elena Páramo, directora del Credes, con el objetivo de conocer su versión sobre los hechos y la toma de las oficinas; sin embargo, ignoró las llamadas telefónicas y dejó en visto los mensajes de WhatsApp, por lo que no se logró conocer su postura ante la manifestación en su contra.