Información en desarrollo Redacción / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán.- El presidente Andrés Manuel López Obrador dio un discurso este martes en la sede de la ONU en aprovechando la toma de posesión de México como presidente de turno del Consejo de Seguridad y recrudeció su posición contra el neoliberalismo. Sería hipócrita ignorar que el principal problema del planeta es la corrupción en todas sus dimensiones: la política, moral, económica, legal, fiscal y financiera. Sería insensato omitir que la corrupción es la causa principal de la desigualdad, de la pobreza, de la frustración, de la violencia, de la migración y graves conflictos sociales”, manifestó. Además dijo que “no vengo a hablar de seguridad como sinónimo de poderío militar ni como argumento para el empleo de la fuerza, mi planteamiento se basa en lo que postuló Roosevelt cuando se creó la ONU: El derecho a una vida libre de temores y miseria y el principal obstáculo es la corrupción en todas sus expresiones”. El presidente fue más allá y sentenció que el mundo está en decadencia “porque nunca antes se había acumulado tanta riqueza en pocas manos, mediante el influyentismo y a costa del sufrimiento de otras personas; privatizando lo que es de todos o lo que no debe tener dueño; adulterando las leyes para legalizar lo inmoral, desvirtuando valores sociales para hacer que lo abominable parezca negocio aceptable”. En ese sentido, dijo que es doloroso y un rotundo fracaso la falta de vacunas contra COVID-19 en países pobres y el desarrollo de dosis por parte de farmacéuticas. Por el bien de todos, primero los pobres, dijo López Obrador y llamó a acabar con el desempleo y la pérdida de valores. https://www.youtube.com/watch?v=PXlfsw4dsr8 REPROCHA A LA ONU Es necesario que el más relevante organismo de la comunidad internacional despierte de su letargo y salga de la rutina, del formalismo; que se reforme y que denuncie y combata la corrupción en el mundo; que luche contra la desigualdad y el malestar social que cunden en el planeta. Con más decisión, profundidad; con más protagonismo, liderazgo”, reprochó a la ONU. Recalcó que para acabar con la violencia es acabar con la desigualdad: “En México nos podría llevar tiempo pacificar el país. Pero la fórmula más segura es atender el fondo, como lo estamos haciendo: por ejemplo, otorgar a los jóvenes opciones de estudio y trabajo para evitar que sean enganchados por la delincuencia. La verdadera victoria sobre las bandas delictivas siempre consistirá en privarlas de su semillero y de su ejército de reserva”, agregó.