Rogelio Arellano / La Voz de Michoacán Uruapan, Michoacán. De cada 10 pacientes que sufren de resfriado común, 4 deben recurrir a tratamientos médicos especializados, pues la infección viral inicial se combina con la presencia de bacterias, lo que se traduce en un coctel de patógenos que obliga al uso de antibióticos para dar paso a tratamientos que obligan a un reposo prolongado. No obstante, la adopción de medidas sanitarias para protegerse de la COVID-19 ha hecho que también la incidencia de pacientes con refriado disminuya en comparación con otros años, señaló el director del Centro de Salud de Uruapan. Por lo anterior, de una gripe o catarro normal que solamente requiere de reposo por un periodo de hasta 7 días, el tiempo debe duplicarse, sobre todo porque las personas no atienden las recomendaciones de cuidado preventivo para evitar complicaciones y evitar las infecciones bacterianas, señaló el doctor Julio César Espinosa. Un fenómeno que desencadena estas complicaciones es la automedicación para presuntamente tratar los resfriados. “Muchas personas aducen que con determinado remedio casero, o en el peor de los casos, medicamentos, pueden superar la gripe y continúan con sus actividades normales, incluso con la ingesta de líquidos a bajas temperaturas; sin embargo, finalmente se presentan las complicaciones”, explicó el director del Centro de Salud. No abrigarse, o bien no guardar reposo y actuar en escenarios de aire contaminado, son otros de los factores para provocar estos cocteles de patógenos que finalmente obligan a tratamientos a base de antibióticos, los cuales deben ser recetados por los profesionales de la salud pues el uso de los mismos sin prescripción médica genera las “súper bacterias” y complica los tratamientos, añadió el directivo. El médico destacó que en esta temporada invernal ha sido menor el número de enfermos de las vías respiratorias atendidos en el Centro de Salud local. “Esto se atribuye a diversos factores, entre ellos, la habilitación temporal de esta institución en espacios del municipio en la colonia San Rafael, pues se está edificando un nuevo complejo médico”, dijo. También, abundó, una disminución en las estadísticas de gripe común en el Centro de Salud se debe a que la actual pandemia de COVID-19 ha generado entre la población un mayor cuidado como el uso de cubrebocas, lavado constante de manos y una sana distancia, escenarios que inhiben la fácil propagación de virus y bacterias. Foto, Rogelio Arellano. “Actualmente se atienden diariamente en consulta externa de cuatro a cinco casos de resfriado y se recomienda a los pacientes reposo absoluto en periodos de al menos una semana, tiempo suficiente para la recuperación del sistema inmunológico; sin embargo, cuatro de cada diez enfermos no acatan estas recomendaciones o surgen las complicaciones, ya sea por mayor resistencia del virus o bien por la aparición de bacterias”. Las consecuencias van desde una amigdalitis hasta neumonía, entre otras que elevan la debilidad o incapacidad del paciente para desarrollar sus actividades cotidianas y el reposo debe prolongarse hasta por tres semanas o más, dependiendo del estado o resistencia del paciente, destacando que en adultos mayores y menores de cinco años la preocupación es mayor. Otro factor que ha provocado menos casos de gripe o influenza obedece a las campañas de vacunación contra el virus H1N1 en sus tres variantes. “Actualmente la campaña iniciada el mes pasado lleva un avance del 70 por ciento en esta ciudad, lo que se traduce en una respuesta positiva de la población”. La meta inicial era aplicar 52 mil vacunas hasta febrero próximo, pero muy posiblemente se prolongue hasta marzo ante la buena demanda de biológico. “Durante esta temporada de vacaciones descansarán las 13 brigadas móviles y semifijas para reactivar labores en enero, mientras tanto la aplicación sigue de manera rutinaria hacia los derechohabientes del Seguro Social e ISSSTE, así como en el Hospital General de Uruapan de la Secretaría de Salud. El galeno exhortó a la población a adoptar las medidas preventivas para evitar los contagios de cualquier tipo de virus o bacterias, sobre todo para proteger a los menores y adultos mayores, destacando que en los casos de pacientes ya infectados se recomienda acompañar los tratamientos con la ingesta de bastantes líquidos, alimentos blandos, especialmente si le duele al tragar, hacer gárgaras de agua tibia con sal, entre otros.
La Voz de Michoacán
