José Luis Ceja / La Voz de Michoacán Jiquilpan, Michoacán. Vecinos del fraccionamiento Colinas del Paraíso solicitarán a la Comisión de Medio Ambiente del Cabildo local el derribo de un árbol en el que, hasta el momento, cinco personas han perdido la vida por ahorcamiento. El último de estos hechos se registró el lunes, cuando una mujer decidió terminar con su vida al colgarse de una de las ramas de este árbol en el que, de acuerdo con los vecinos de este emplazamiento, al momento ya tres personas del sexo femenino y dos masculinos han decidido quitarse la vida desde 2008 hasta la fecha. El árbol se encuentra en un predio ubicado en una bifurcación en el acceso a la Universidad de la Ciénega del Estado de Michoacán de Ocampo, en el que, en 2008, meses después de la fundación del fraccionamiento, un menor de 12 años de edad decidió quitarse la vida mediante el ahorcamiento en una de las ramas de este árbol. En abril del 2016 la región se conmocionó tras la noticia del suicidio de dos niñas, quienes fueron encontradas suspendidas mediante sogas en el cuello de las ramas del mismo árbol. Tiempo después se sabría que las niñas, quienes eran vecinas de este mismo fraccionamiento, habían establecido una suerte de pacto suicida luego de participar en un juego de retos en redes sociales. En septiembre del 2021, el padre de una de las menores fallecidas decidió utilizar el mismo árbol para terminar con su vida. Finalmente, el último cuerpo, esta vez de una mujer, fue encontrado este lunes por los vecinos, quienes desde el sábado pasado habían establecido una intensa búsqueda de la mujer, quien había desaparecido desde el sábado 1 de enero. De hecho, los vecinos de este asentamiento señalan que en todos los casos las personas habían desaparecido los sábados previos y habían sido encontrados al lunes siguiente ya sin vida. Es ante estos hechos que, aseguran, con el fin de evitar más desgracias, los vecinos solicitarán el derribo de este árbol o que, al menos, los propietarios de este predio establezcan medidas de seguridad para evitar que las personas se acerquen. Colinas del Paraíso Fue a raíz del programa Tu Casa 2007 que casi mil familias en situación de pobreza patrimonial lograron acceder a viviendas subsidiadas por los tres órdenes de gobierno y la iniciativa privada. Para el desarrollo de este programa se eligió un predio donado por un empresario sahuayense. El terreno se ubica en un macizo rocoso que perteneciera al hoy extinto Ejido Agrícola de La Cofradía, que dio paso a los asentamientos de lo que hoy son la colonia Cuauhtémoc y Colinas del Paraíso. Actualmente Colinas del Paraíso, pese a tener una urbanización y diseño de avanzada, es considerado como uno de los asentamientos de Zonas de Atención Prioritaria debido a los altos índices de pobreza y marginación debido a la lejanía con el centro de la ciudad. Aunque en 2018 los habitantes de este asentamiento solicitaron formalmente a las autoridades municipales que se les otorgara el rango de comunidad, el Cabildo en turno negó esta petición bajo el argumento de que el pozo que abastece de agua potable a este núcleo humano se encuentra dentro de los activos del Organismo Operador de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento, y en la entonces vigente Ley de Aguas Nacionales se estipulaba que las comunidades administrarían sus propios pozos de abastecimiento, ello implicaba para el municipio la pérdida del permiso de explotación de aguas subterráneas en favor de la comunidad. El traslado entre el fraccionamiento y el centro de la ciudad implica un recorrido de al menos 45 minutos en servicio colectivo y al menos 15 en servicio de alquiler con un costo de 90 pesos en taxi. Pese a que cuenta con un módulo de seguridad pública, éste se encuentra abandonado desde su construcción, en 2009, y dado el tiempo de traslado del centro al fraccionamiento regularmente éste carece de seguridad y vigilancia. Pese a que la Ley Orgánica Municipal no contempla una figura de autoridad institucional para fraccionamientos o colonias, el municipio históricamente ha permitido que los habitantes de este fraccionamiento celebren asambleas electivas para nombrar representantes ante las autoridades de este municipio. En lo que respecta al árbol que pretenden sea derribado, los vecinos señalaron que presentarán también la solicitud ante el encargado de su localidad que funge también como integrante del colegiado para evitar que más personas utilicen este lugar para quitarse la vida.
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