ETELBERTO CRUZ LOEZA Hay intentos reiterados por alinear a los otros poderes constitucionales, pero la Suprema Corte, con todos sus zigzagueos y grillas, en ocasiones ha bloqueado iniciativas extremas… José woldebnberg Atrajo mi atención la respuesta de la Secretaría de Hacienda a la solicitud presentada por el Instituto Nacional Electoral que, ordenado por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, en la que pedía se le asignara una extensión presupuestaria para atender los gastos que representaba=significaban, y eran generados, por el ejercicio de la consulta pública del 10 de abril próximos, referentes a la llamada revocación de mandato. Realmente no me extraño. Era una de las dos únicas respuestas y la secretaría de hacienda su fue por la de la docilidad: disciplinarse ante el mandato del Jefe, que continúa mostrando cerrazón, autocratismo y demagogia. Igualmente me extrañó que hubiera sido Félix Arturo Medina Padilla, titular de la Procuraduría Fiscal de la Federación, supliendo por ausencia al secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, extraño, sumamente extraño, porque fue un mando del máximo tribunal federal en materia electoral. Centro de su respuesta es…” No es viable jurídicamente otorgar recursos adicionales a ese instituto, pues, - reitera - que en el presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2022 aprobado por la Cámara de Diputados no existe disposición y asignación específica de recursos que permita aumentar el presupuesto del Instituto Nacional Electoral u otorgar excepcionalmente recursos adicionales…Lo único viable es que el INE haga ajustes a su presupuesto”. Mas en Hacienda y en presidencia de la República – sus áreas jurídicas – no consideraron los tiempos constitucionales, de ese momento: presidencia de la República debió entregar a la H. Cámara de Diputados, el proyecto de presupuesto a más tardar el 8 de septiembre de 2021 y definirse, éste, el 15 de noviembre de ese año…y en esos días la llamada Consulta Pública no se definía. Todo lo primero ya se sabía, mas, el INE, para cumplir el mandato constitucional y dado que era una actividad trascendental y prioritaria mandada por poderes Federales, solicitó, previa presentación, tal como lo establece la Constitución, del correspondiente presupuesto específico, ampliación presupuestal para realizarla - ascendía a cantidad cercana a los 5 mil millones de pesos -, que después de jaloneaos-estiras y aflojas, además de revisiones y ahorros quedó en casi 4 mil millones de pesos, que fue lo que se solicitó a Hacienda. La única puerta – lo viable, dice el Procurador Fiscal – es que el INE haga ajustes a su presupuesto, palabras recomendadas por el presidente de la República, señor Andrés Manuel López Obrador. En pocas palabras: autoritarismo o democracia. ¿O caprichos o visión de Estado? ¿Miedo a perder el Poder o Firmeza institucional? Lo que debió ser es que el secretario de Hacienda, determinada por la sentencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación hubiera solicitado a la H. Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, recursos adicionales para atender esa orden judicial y fueran ellas, dependencia central y poder autónomo y el único poder con la atribución constitucional de tratar, ajustar el presupuesto de Egresos dela Federación – artículo 74°, fracción IV. Y Aquí estamos. ¿Ahora qué sigue? Aunque el INE solicitó a ayuda institucional y gratuita al CFE, al IMSS y a Talleres Gráficos de la Nación, aun no tiene respuesta y seguramente, no la habrá favorablemente para el INE…así que …está la interrogante… ¿Qué sigue en esta lucha? O autoritarismo o visión de Estado y democracia. En otra movida en este juego de poder, la Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó que el Instituto Nacional Electoral debe-está obligada a realizar la Consulta Ciudadana sobre la revocación de mandato con los recursos –“el presupuesto” – que tenga-exista de la manera más eficiente, tanto como lo permita el presupuesto que hasta el momento tiene programado…Y no se debe ejecutar algún otro tipo de responsabilidad penal o administrativa en contra de los integrantes del Consejo General., así que el ejercicio va, con lo que se tenga y como salga…¡cartucheras al cañón! Y se libera al Instituto Nacional Electoral de cualquier otra situación, pero aun hay más…nuestra Suprema Corte tiene una gestión del INE y tal vez haya sorpresa. Un zigzagueo de nuestra Suprema Corte fue y es, no haber modificado la pregunta de la consulta…y quedó así: ¿Estás de acuerdo en que …presidente de los Estados Unidos Mexicano, se le revoque el mandato por pérdida de confianza o siga en la presidencia de la República? (redactada y autorizada por ella misma). Son dos preguntas en una sola. Así, está confusa. Si la respuesta es sí, la disyuntiva complementaria, genera confusión y hasta contradicción. El presidente de la República lo expresa: hicieron tan complicada la pregunta de la consulta que primero no se conoce, la gente no sabe si va a ser sí o no. Entonces pedirles a todos que busquen un buen traductor porque eso tiene que ver con los expertos para que no se vayan a equivocar al momento de ir a votar…Y, (adelantó) informaron –¿…? – que el Tribunal Electoral (del Poder Judicial de la Federación), no sé si sea cierto, va a cambiar la pregunta. Ahora bien, no se necesitan traductores, ni expertos. Es sentido común: una única pregunta y solamente una respuesta, unívoca. Curiosamente: 1° Desde hace meses está definida por la Corte este texto. ¿Por qué hasta ahora la cuestiona el presidente de la República? Es deseable que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación la redacte con sentido común y se necesite únicamente un bisílabo, directo y que no genere confusión. 2° Los votantes no deben saber, sólo, que los aleccionen y se les diga qué palabras anotar. Los que acudan libremente a ejercer su derecho deben entender la pregunta y anotar su respuesta. Simple y de sentido común. 3° Si se deja la pregunta tal cual está redactada… ¡no tiene caso realizar este ejercicio de consulta ciudadana!¡El resultado ya se sabe, se conoce!