José Luis Ceja / La Voz de Michoacán Jiquilpan, Michoacán. Al término de la sesión de Cabildo de Jiquilpan, la regidora Martha Santillán llamó a la ciudadanía con carácter de urgente para emprender el rescate integral de las Áreas Naturales Protegidas del Parque Juárez y Bosque Cuauhtémoc de esta ciudad, ante la cercanía del periodo de estiaje y el deterioro que presentan estas zonas arboladas. Parte del deterioro de estos espacios, declarados como Áreas Naturales Protegidas desde el trienio 2005-2007, se debe a los asentamientos de La Nopalera y El Pitayito, cuyos habitantes disponen de manera sistemática de los recursos maderables; pese a que, en teoría, existe un patronato integrado por ciudadanos, autoridades locales e instituciones académicas cuyo propósito es la explotación integral de manera sustentable de estos lugares, organismo que nunca pasó de la mesa en la que fue conformado. De acuerdo con la representante popular Martha Santillán, es necesario que se reactiven los mecanismos ciudadanos que puedan garantizar la supervivencia de estos espacios ante la potencial crisis hídrica y los daños por invasión. Ante la falta de crecimiento ordenado de estos asentamientos humanos, habitantes de la colonia La Nopalera temen riesgos a su salud ante la saturación de las fosas sépticas de las viviendas, ya que carecen de red de drenaje, esto fue señalado por Alberto Gómez Zambrano, quien fuera líder de este asentamiento que se encuentra dentro del perímetro original del Bosque Cuauhtémoc de este municipio. De hecho, señaló que hace apenas unos años que esta colonia cuenta con servicio de agua potable, no así de drenaje, debido a que el presupuesto realizado para la introducción del servicio resultaba demasiado elevado. Destacó sobre el presupuesto presentado que además de ser elevado nunca se estableció de manera clara de cuánto sería la aportación de cada uno de los vecinos, por lo que incluso no se ha podido reunir con los habitantes de este lugar para discutir las posibilidades de aportación de los colonos. Agregó que la preocupación sobre posibles riesgos a la salud es más latente durante la temporada de lluvias, puesto que muchos de los excedentes de agua van a filtrarse a las fosas de las viviendas, lo que les resta tiempo de vida útil y a la larga en la intención de evitar riesgos sería necesaria la apertura de nuevas fosas; sin embargo, no en todas las viviendas existe el espacio para una nueva excavación. Otros vecinos señalaron que hace tiempo se había planteado la posibilidad de adquirir un terreno para la instalación de una fosa general para recibir las descargas de los hogares, pero la idea fue desechada ante la falta de recursos económicos, tanto para adquirir el terreno como para la creación de la infraestructura, además de que solamente las líneas de conducción de los hogares a la fosa resultaban igual de costosas que la introducción formal del sistema de drenaje. El inicio de la invasión La colonia La Nopalera se funda cuando un grupo de personas comienza a fincar pequeños jacales en una porción del Bosque Cuauhtémoc, en unos predios propiedad de Amalia Solórzano de Cárdenas, y comienza un proceso legal por el tema de las escrituraciones que no estuvo exento de acusaciones contra Porfirio Barbosa, quien representaba legalmente en este caso a la viuda del general Lázaro Cárdenas, básicamente los vecinos de estos predios cuestionaban la veracidad de la representación que decía tener el exfuncionario del Distrito Federal durante la Jefatura de Gobierno de Cuauhtémoc Cárdenas. De hecho, el proceso de escrituración de algunos predios se encuentra todavía inconcluso, por lo que algunos propietarios no han podido acceder a programas de mejoramiento de vivienda. La colonia, cuyo único acceso es a través de las Áreas Naturales Protegidas del Bosque Cuauhtémoc y Parque Juárez, se encuentra en un marcado rezago en cuanto al desarrollo de obra pública, ya que la totalidad de sus calles son de tierra y piedra, carece de servicio de transporte público regular, de módulo de seguridad pública, y pese a que el servicio de agua potable apenas aterrizó hace un par de años, la línea de conducción y tanque de almacenamiento y operación de esta red han sido texto recurrente señalados como logros desde las tres últimas administraciones municipales. En su oportunidad, integrantes de este Patronato o del Consejo Municipal de las Áreas Naturales Protegidas reconocieron que apenas al 30 por ciento el cumplimiento del Plan de Manejo Sustentable de las Áreas Naturales Protegidas en Jiquilpan se había cumplido; el biólogo Jaime Nava, integrante del Consejo de Administración de estos sitios, destacó en su momento que de manera general no se ha dado el cumplimiento requerido por falta de recursos económicos. Recordó Nava Velázquez que fue la Unidad Michoacán del IPN quien elaboró el Plan de Manejo de las ANP de Jiquilpan (Parque Juárez y Bosque Cuauhtémoc). En este documento se establecieron actividades a realizarse en el corto, mediano y largo plazo: “Parte de las actividades programadas para el corto plazo se han estado implementando sin embargo la limitante fundamental ha sido la cuestión económica que creo que es un aspecto general que se presenta en todos los municipios del Estado”. “Creo que de lo que teníamos programado originalmente llevamos un 30 por ciento, se ha hecho parte del cercado perimetral, se han habilitado algunas áreas, se ha derribado parte del arbolado muerto en pie que representan un peligro para la gente que hace actividades recreativas”. Números 2 Áreas Naturales Protegidas en Jiquilpan 600 personas viven dentro del perímetro de las ANP´s 30 por ciento el cumplimiento del Plan de Manejo establecido Citas “Parte de las actividades programadas para el corto plazo se han estado implementando sin embargo la limitante fundamental ha sido la cuestión económica” Jaime Nava, Biólogo Gráficas Áreas Naturales de Jiquilpan
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