AP/La Voz de Michoacán Alemania. Esta vez, no hubo milagro. Hamburgo finalmente descendió de la Bundesliga, en medio de caóticas escenas en su estadio. El único club sin descender desde la fundación de la liga en 1963, el “Dinosaurio” cayó peleando tras 54 temporadas en la división de honor, al vencer el sábado por 2-1 al Borussia Moenchengladbach. Tras el silbatazo final, columnas de policías custodiaron la cancha luego que los aficionados detrás de uno de los arcos empezaron a encender bengalas, arrojando varias hacia el césped para generar una inmensa nube de humo negro en ese sector del estadio. Impresionante despliegue policía en el partido Hamburgo vs M” Gladbach pic.twitter.com/Gbs5jnxOpp — JohnnyTuki #9446 (@jonasuy1) 12 de mayo de 2018 La mayoría de los hinchas reaccionaron con furia ante los desmanes. "¡Somos la gente de Hamburgo y ustedes no lo son! ¡Váyanse!”, vociferaron. Tras tambalearse con el descenso en recientes temporadas, Hamburgo necesitaba la victoria y la ayuda del ya descendido Colonia ante Wolfsburgo para seguir aferrándose a la primera división. Pero la victoria 4-1 de Wolfsburgo dejó a Hamburgo dos puntos detrás del puesto que da acceso al playoff de descenso. En cambio, Wolfsburgo enfrentará a Holstein Kiel, tercero en el campeonato de segunda división, en una serie de dos partidos que definirá cuál de los dos estará en la Bundesliga la próxima temporada. Freiburgo aseguró la permanencia al vencer 2-0 a Augsburgo. En la puja por las copas europeas, Hoffenheim disputará la próxima Liga de Campeones tras vencer 3-1 Borussia Dortmund, que también se clasificó como cuarto en la tabla. Bayer Leverkusen pudo haber superado al Dortmund por mejor diferencia de goles, pero perdió 3-2 ante Hannover y al quedar quinto deberá conformarse con participar en la Liga Europa. Leipzig también estará en la Liga Europa tras golear 6-2 a Hertha Berlín. Bayern Múnich, que sentenció el título con cinco fechas de anticipación, festejó al recibir el trofeo y las medallas, aunque perdió de local 4-1 ante Stuttgart. El presidente de la Bundesliga Reinhard Rauball entregó el trofeo al capitán Manuel Neuer, quien no juega desde septiembre por una lesión y mantiene una carrera contra el tiempo para poder disputar el Mundial de Rusia el mes próximo.