Leo Zuckermann Hay un principio inquebrantable en la política: nadie vota por un candidato que no conoce. Por eso es tan importante medir el reconocimiento de nombre de los posibles candidatos en las encuestas. ¿Y cómo se logra que los votantes conozcan a los candidatos? Antes que comiencen las campañas, y se trasmitan los spots de radio y televisión que los den a conocer, solo tienen un camino: su aparición en los medios de comunicación tradicionales. Sí, cada vez son más importantes las redes sociales para hacerse famoso, pero en México sigue pesando muchísimo más la cobertura en la televisión, radio y periódicos. Veamos cómo van los posibles candidatos a la Presidencia en este aspecto. Central de Inteligencia Política realiza el Análisis de Reputación Mediática de Actores (ARMA) donde diario miden, comparan y contrastan las tendencias mediáticas de los posibles candidatos para el 2024. A través de una tecnología desarrollada por ellos, recaban y filtran todas y cada una de las noticias publicadas en más de 35 diarios, 35 canales de televisión y 30 emisoras de radio. A todas las piezas informativas le dan un “valor comercial” como si fueran inserciones publicitarias pagadas, de acuerdo a los costos que publica cada mes el “Directorio de Medios Publicitarios de México”. No es lo mismo una nota que aparece en el interior de un periódico, que una en primera plana, o una en un noticiario en televisión nacional en horario estelar. CIP me compartió los datos de su estudio ARMA sobre “presidenciables” en el acumulado entre el 14 de junio de 2021 y 14 de febrero de 2022. La que tuvo una mayor cobertura mediática en este periodo fue la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, con notas con un valor comercial de dos mil 777 millones de pesos. En segundo lugar está el canciller Marcelo Ebrard con dos mil 378 millones de pesos. En tercer sitio, con mil 236 millones, está el senador Ricardo Monreal. Le sigue el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, con mil 99 millones. Todos estos son aspirantes de Morena. Hasta el quinto lugar sale un posible candidato opositor: el panista Ricardo Anaya con 558 millones de pesos. A continuación viene el priista Alejandro Moreno con 548 millones y luego Samuel García, de Movimiento Ciudadano, con 399 millones. ARMA también evalúa si las notas son positivas, negativas o neutras. En la evaluación de más positivas sale en primer lugar, de nuevo, Sheinbaum, seguida de Ebrard, López y García. Anaya, Monreal y Moreno, en cambio, tienen una cobertura con saldo negativo. ¿Qué nos dicen estos datos de siete posibles candidatos, cuatro de Morena y tres de oposición? 1. Que en los medios tradicionales el 83% de la cobertura se lo llevan los de Morena, tres de ellos con saldo positivo y uno negativo. 2. Los de la oposición, en cambio, acaparan tan solo el 17% de la cobertura, dos de ellos con saldo negativo y uno positivo. 3. La cancha está muy dispareja. Los de Morena aparecen en las noticias gracias a los puestos públicos que ostentan. Los opositores o no generan noticias interesantes o mantienen un bajo perfil. Esto se entiende porque los que se han atrevido a hacerlo acaban vituperados por el presidente López Obrador, si no es que perseguidos por la Fiscalía General de la República. 4. Los resultados de los candidatos de Morena se parecen mucho a las preferencias que midió la encuesta de El Universal de marzo de 2022 donde 31% de los encuestados se mostró a favor de que Sheinbaum sea la candidata de Morena a la Presidencia, 25% prefirió a Ebrard, 9% a Monreal y 6% a López. No creo que la correlación sea gratuita. Entre más sale uno en los medios con cobertura positiva, más tiene intenciones de voto a su favor. 5. En la encuesta de diciembre de Reforma, apareció Luis Donaldo Colosio con buenos números: 56% reconoció su nombre y 27% dijo que estaría dispuesto a votar por él. Sin menosprecio a su labor actual, estas cifras se deben más al recuerdo del padre asesinado que al hijo que hoy gobierna Monterrey. La de Colosio es una ventaja competitiva frente a otros posibles candidatos opositores, pero, en la medida en que no salga en los medios nacionales, como lo demuestra el estudio de ARMA, será muy difícil que alcance en conocimiento de nombre y preferencias a los morenistas. Alerto que esto es lo que está sucediendo hoy. Todavía falta mucho para el 2024 y puede haber muchos cambios. Twitter: @leozuckermann