Gonzalo Reyes González / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Por fin a las 08:00 de la noche de este viernes 6 de mayo se realizará la corrida de toros que mayor expectativa ha ocasionado en los últimos tiempos en la capital michoacana. Será en el Palacio del Arte de Morelia y, si el tiempo no lo impide, se lidiarán a la usanza española hermosos y finos toros de la prestigiada ganadería de Julián Hamdan. Precisamente por la presencia de esta ganadería, que se ha constituido como una de las pocas que conservan el trabajo ganadero bravo y de triunfos, desarrollado durante décadas por los reconocidos hombres del toro mexicano, Marcelino Miaja y Pepe Chafik, es que esta corrida es esperada, pero también por la presentación por primera vez en tierras michoacanas del diestro español Antonio Ferrera y por la alternancia en el cartel de Diego Silveti, con el complemento en la terna del torero moreliano Jorge Sotelo. Jorge Sotelo es el matador moreliano que desde muy corta edad se enfundó en el traje de luces, a los 12 años como becerrista y en el 2003 actuó en Armenia, Colombia, logrando convencer y convenciéndose de su vocación en aras de alcanzar el doctorado. Ya con caballos debutó en Morelia, el 13 de mayo de 2005, y en la Monumental Plaza México se presentó el 2 de octubre de 2007 con el novillo de nombre Tesonero, de Garfias, alternando con Arturo Saldívar y Jairo Miguel. El 14 de agosto de 2008 obtuvo su alternativa como matador de toros en Teziutlán, Puebla, de manos del maestro Eloy Cavazos, y como testigo, Jerónimo, con toros de Rancho Seco. La confirmó el 11 de enero de 2015 en la Monumental Plaza México de parte de Alfredo Ríos “El Conde” y como testigo el español Pedro Gutiérrez, El Capea, con un bravo encierro de la ganadería La Estancia. En adelante su vida taurina se ha plagado de una preparación meticulosa y de sonados triunfos, como el obtenido el año pasado, el 5 de octubre en Lagunillas, Michoacán, donde ante un toro difícil, al que muy poco se le podía hacer, logró un intensa faena arrancándole valerosos y templados pases llenos de mando, cuando el astado simplemente no quería colaborar, lo que condujo a la obtención de una merecidísima oreja y a lidiar el último de la tarde que se había quedado sin matador en turno, logrando una faena tan meritoria como en su primer enemigo para la obtención de los apéndices y el reconocimiento del conocedor público que de pie ovacionó sus faenas. Con ese poder y valentía Jorge Sotelo llega a su serio compromiso de esta noche. Diego Silveti es una antología del toreo mexicano. La cuarta generación de hombres que le han dado lustre a la fiesta brava mexicana: hijo de David Silveti o simplemente El Rey David, nieto de Juan Silveti Reynoso, Juan Sin Miedo, y bisnieto del Tigre de Guanajuato, don Juan Silveti Mañón, el iniciador de la dinastía de toreros mexicanos que se han encumbrado con su depurado arte y valor por el mundo entero, por lo cual el estandarte de Diego lo ha colocado en lo alto. Parte de su preparación para convertirse en figura la realizó en España, ante el toro grande y diverso en comportamiento y encastes. Su alternativa fue con José Tomás y Alejandro Talavante, con toros de Salvador Domecq, en la plaza de Guijón, y a los pocos días fue cornado en su debut como matador en el año 2009 en Ávila, para reaparecer después en la Monumental Plaza México. De ahí conocemos su carrera ascendente y de grandes triunfos, de sonados rabos y de poderosos indultos, lo que lo ha convertido en una de las figuras taurinas más representativas del momento en nuestro país. Y en el regreso a ruedos españoles, donde el toreo de Diego, pausado y lleno de poder y temple, lo ha hecho imponerse ante todas las adversidades en cuanta plaza se le ve actuar. Antonio Ferrera es el torero del momento, con una campaña en varios años de triunfos sonados por el mundo entero, y regresa directo de España, donde ha enfrentado a los encastes más duros y triunfando sobre estos marrajos, para tenerlo hoy en Morelia, esta misma noche, donde nos ha de mostrar lo grandioso y espectacular de su variado toreo, que nos recuerda el arte antiguo y que tanto ha gustado sobre todo en ruedos mexicanos, al hacer evocación de pases consagrados por las grandes figuras nacionales, como en aquel esplendoroso indulto de hace más de dos años logrado en la Monumental Plaza México, al toro bravísimo, por cierto de La Joya y de nombre Tocayo, al que toreó con el capote con el sabor de Gaona y el toque del Pana y con la muleta al estilo del monstruo de Córdoba, el gran Manolete, mirando a los tendidos cuando el astado pasaba sobre sus manoletinas, en cites a lo largo que el toro Tocayo, siempre respondió con bravura y alegría, lo que entusiasmó a la concurrencia que no dudó en pedir el indulto ante uno de los grandes toros que realmente lo mereció y que estuvo en las mejores manos las de Antonio Ferrera. Julián Hamdan ha sido un escrupuloso criador de ganado bravo, lo más selecto de las líneas que han engrandecido a la cimiente brava mexicana: sangre del Márquez de Saltillo, a la que le dio su toque personal los grandes alquimistas de la bravura mexicana, Miaja y Chafik, por lo que ahora veremos toros de empuje, con casta y trapío. Y también con el antecedente que es la primera vez que lidia este ganadero en Morelia, como la presentación de Antonio Ferrera, así que la expectación para la corrida de esta noche en el Palacio del Arte está más que justificada.