¿Quién es El Chueco? Ahora el hombre más buscado que controla y derrama sangre en la Sierra Tarahumara

“El Chueco” es el presunto autor de los asesinatos de los dos sacerdotes en Chihuahua, mismo que cuenta con una orden de aprehensión desde 2018 por decenas de delitos que van desde secuestros y asesinatos hasta robo de cobre y tala ilegal.

Redacción / La Voz de Michoacán

Chihuahua. El pasado 20 de junio se dio a conocer una terrible noticia que ha provocado la indignación de la sociedad y de la iglesia, pues dos sacerdotes fueron asesinados dentro de un templo en Cerocahui, municipio de Urique, Chihuahua. El presunto responsable José Noriel Portillo Gil, mejor conocido como “El Chueco”, quien ahora se ha convertido en el hombre más buscado en la Sierra Tarahumara.

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Este hombre, además de ser el presunto responsable del asesinato de los sacerdotes, es buscado por las autoridades desde el 2018 por los delitos de asesinato, tala ilegal y robo de cobre. Además de estar vinculado al “Los Salazar”, célula del Cártel de Sinaloa y grupo que ha llenado de terror y sangre una de las zonas turísticas más importantes de la región Tarahumara.

De acuerdo con Grupo Formula, “El Chueco”, es buscado desde el 2018 por ser el presunto responsable del asesinato de la periodista Miroslava Breach, así como del el secuestro y homicidio del activista Cruz Soto Caraveo en 2019, mientras que el diario Noroeste, lo ha señalado como el supuesto asesino del profesor estadounidense, Patrick Braxton.

“Los Salazar” y control de la Sierra Tarahumara

José Noriel Portillo Gil es originario de Urique, tiene alrededor de 30 años y es es el supuesto líder de “Los Salazar”, grupo que tiene controlada la zona de la Sierra Tarahumara como San Rafael, Ciénega de Trejo, Guadalupe Coronado, Mesa de Arturo, Cerocahui y Bahuichivo, y al que se le atribuyen decenas de homicidios, secuestros, ataques contra las autoridades, tala ilegal, robo de cobre y muchos delitos más.

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A raíz de los homicidios de los sacerdotes, el presidente Andrés Manuel López Obrador mencionó en una de sus recientes mañaneras que “El Chueco” tiene un orden de aprensión desde el 2018, pero que desde entonces no ha sido capturado por las autoridades. Por su parte, la Fiscalía de Chihuahua anunció una recompensa de 5 millones de pesos por información que ayude a su captura.

De acuerdo a varios medios de comunicación, la zona Tarahumara se ha visto inmersa en una ola de violencia, tanto que ha obligado a cientos de familias a huir de sus hogares para huir de la delincuencia que impera en la comunidad, en la que el crimen tiene controlado todo, hasta la venta de cerveza y demás productos gracias a las cuotas que piden.  

El asesinato de los sacerdotes

Lo que se conoce hasta el momento de este lamentable hecho es que un grupo armado persiguió a un guía de turistas, pero este al verse amenazado, entró a la Parroquia San Francisco Javier para refugiarse y buscar ayuda; sin embargo, su atacante le disparó y lo asesinó en el atrio de la iglesia.

Los estruendos de las armas provocaron que los dos sacerdotes salieran a ver qué era lo que pasaba y vieron al guía de turistas herido, por lo que uno de ellos se acerco para auxiliarle, pero en ese momento el religioso recibió un disparo y murió. El segundo padre intentó calmar al atacante sin poder lograrlo y perdiendo también la vida en el lugar.

Luego de haberlos matado, el grupo criminal recogió y se llevó los cuerpos. La iglesia lamentó los hechos y exigió a las autoridades hacer justicia y encontrar los cuerpos de los dos padres, por lo que la Gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos Galván, aseguró que ya estaba avanzando en las investigaciones de los hechos y que se llegaría hasta las últimas consecuencias.

Esto provocó una intensa movilización en la que participaron 250 elementos del Ejército para lograr encontrar a Portillo Gil, pero hasta el momento no se ha dado con el paradero de este delincuente. A pesar de ello,  los cuerpos de los sacerdotes jesuitas, Javier Campos y Jesús Mora, y del guía de turistas Javier Mora, lograron ser localizados por las autoridades locales.