El Universal/La Voz de Michoacán México. La primera vuelta al mundo fue un viaje repleto de heroicidades y penurias, con desafíos extremos y un saldo trágico: apenas 33 de los 239 marineros que integraban la tripulación lograron regresar a España tras completar la travesía en el siglo XVI. La exposición "El viaje más largo" reúne por primera vez en el Archivo de Indias de Sevilla los documentos y crónicas originales que permitieron estudiar y analizar la circunnavegación del planeta iniciada en 1519 por el portugués Fernando de Magallanes, que se puso al servicio de la corona española a cambio de financiamiento. Con un total de 106 piezas y documentos, la muestra aborda en orden cronológico la expedición que partió de la capital andaluza, y tiene como narradores a varios de los cronistas de la epopeya que abarcó 32 mil millas marítimas y que se prolongó durante más de tres años. "Es una aventura marítima y técnica inigualable, que cambia la concepción del mundo. La exposición es una oportunidad para mostrar la materia prima, tras una labor quirúrgica que nos permitió extraer secuencias en las que los protagonistas narran su gesta", señala a EL UNIVERSAL Antonio Fernández Torres, comisario de la muestra y director del proyecto. "Queremos que el público en general se sienta identificado con lo que está viendo y leyendo y para eso necesitábamos establecer una conexión emocional, aunque la base son los documentos originales que representan una oportunidad única, ya que es difícil que vuelvan a coincidir", indica el experto. Entre las valiosas piezas destacan el Tratado de Tordesillas, por el que España y Portugal se repartieron el Nuevo Mundo; y el testamento del español Juan Sebastián Elcano, que comandó y culminó la expedición tras la muerte de Magallanes; además del libro Las paces del Maluco, el único documento redactado a bordo que ha sobrevivido. También resaltan las ediciones históricas de las crónicas de Pigafetta, Albo, Mafra y Genovés, junto a la talla original y restaurada de la Virgen de la Victoria, a la que se encomendaron los marineros; en vano, porque en la expedición hubo más desventuras que regocijos. "Magallanes aportó su visión y liderazgo para llevar a cabo la misión y Elcano la concluyó. Es insustancial cotejar la importancia que tuvo cada uno en la gesta. Lo que importa es que llevaron a cabo la travesía", matiza el director del proyecto. El despliegue patrimonial de la muestra está inmerso en un contexto ambiental y emocional generado por audiovisuales y una novedosa escenografía, con la que se busca hacer sentir al visitante los retos de la expedición que transcurre como si fuera un cuaderno de bitácora por las diferentes fases del viaje: Sueño, Partida, Exploración, Destino, Regreso y Transformación. Todas las salas mantienen una baja luminosidad y están climatizadas para evitar cualquier deterioro de los documentos que reviven una hazaña que tardaría mucho tiempo en ser emulada. El inglés Francis Drake completó su vuelta al mundo 60 años después de que Elcano concluyera la circunnavegación a bordo de la Victoria, la única de las cinco naves que componían la flota inicial que volvería a España tras concluir la travesía. "La conquista de México implica un cambio de paradigma, ya que cuando vuelve Elcano la búsqueda del paso a Asia ha dejado de ser el principal objetivo de la corona castellana. A partir de ahí el enfoque ya no será tanto comercial, sino que se centrará más en la expansión territorial", agrega Guillermo Morán, otro de los comisarios de la muestra. La expedición de Magallanes y Elcano retratada en la exposición se inscribe en la fuerte competencia que mantenían las dos grandes potencias marítimas de la época (España y Portugal), en innovación y tecnología, con el objetivo prioritario de descubrir nuevas rutas comerciales. La muestra que está organizada por Acción Cultural Española y el Ministerio de Cultura, permanecerá abierta al público hasta febrero de 2020.