Ciudad de México.- El cantautor cubano Silvio Rodríguez Domínguez, miembro de la llamada Nueva Trova Cubana, famoso por icónicos temas como “Ojalá”, “La maza” o “El necio”, celebrará mañana su cumpleaños 70. De acuerdo con datos biográficos disponibles, el reconocido músico nació en San Antonio de los Baños, Cuba, en 1946. Su padre fue Víctor Dagoberto Rodríguez Ortega, campesino agrícola y poeta aficionado, y su madre Argelia Domínguez León, peluquera. Según el músico, su vocación musical se la debe muy probablemente a la inclinación que tenía su madre por el canto. El portal “Buscabiografías.com”, señala que el destacado cubano cursó estudios de piano pero fue a los 16 años, época en la que ingresó al servicio militar cubano, que decidió probar suerte con la guitarra. Fue en marzo de 1964 que prestó este servicio obligatorio en Cuba, tiempo en el que como soldado sirvió en una unidad de infantería, en una de servicios y finalmente en una de comunicaciones, añade el portal “EcuRed”. Poco tiempo después, fue enviado a trabajar a la Sección Política del Ejército de Occidente en calidad de dibujante de la revista “Venceremos”, haciendo uso de sus conocimientos pues el músico también realizó estudios de pintura en la Escuela de San Alejandro. Apoyado por sus compañeros de armas, Rodríguez participó en el I Festival de Aficionados de las FARS, donde interpretó dos canciones de su autoría y cuando estaba por concluir el servicio militar, obtuvo una Primera Mención de Poesía en el Concurso Nacional de las FARS con “Horadado Cuaderno No 1”. Al cumplirse el primer aniversario de la revista cultural “El Caimán Barbudo”, en 1967, se realizó un concierto homenaje en el Museo Nacional de Bellas Artes, donde en compañía de Teresita Fernández y jóvenes intelectuales Silvio ofreció al público algunas de sus canciones. Una de las etapas importantes en la trayectoria artística de Rodríguez fue su participación en el grupo de experimentación sonora del Instituto Cubano de las Artes y de la Industria Cinematográfica (ICAIC). En sus colaboraciones como compositor en dicho instituto, participó en la música para documentales como: “Testimonio”, “El hombre de Maisinicú”, “Al sur del Maniadero” y “La Nueva Escuela”. En 1972, junto a Eduardo Ramos y Augusto Blanca, viajó a Berlín para representar a Cuba en el III Festival Internacional de la Canción Política, patrocinado por la Juventud Libre Alemana. Dentro de las numerosas giras realizadas por Rodríguez como representante del Movimiento de la Nueva Trova y cultor de la canción política, destacan las realizadas por Angola en 1976. Poco a poco aumentó su popularidad y se le confirió un espacio televisivo semanal, "Mientras tanto", llamado así por la canción homónima de Silvio; el programa se vio envuelto dentro de las polémicas culturales de la época y fue cancelado. Ese mismo año conoció a Pablo Milanés y a Noel Nicola en un festival de la canción y poco después los tres dieron inicio al movimiento de la Nueva Trova Cubana. La música de Rodríguez ha pasado por distintos géneros musicales, como el jazz y sus raíces en las viejas baladas de la música negra, al igual que con el son de la cultura musical cubana, lo cual le ha permitido explorar nuevas posibilidades musicales. La trayectoria musical de Rodríguez está contenida en 18 discos de estudio, cuatro discos de conciertos en vivo, cinco recopilatorios, dos EP, así como 57 discos en los que ha colaborado. Con esta destacada trayectoria, el músico ha sido reconocido en todo Hispanoamérica, Estados Unidos, Europa y África. En 2008, al frente de un grupo de artistas y escritores cubanos recorrió 16 prisiones cubanas actuando ante más de 40 mil reclusos. En 2010, luego de 30 años de exclusión, pudo volver a Estados Unidos para realizar un memorable recorrido. Poco después hizo un concierto en las calles de Medellín, Colombia, otro en Ciudad Juárez, y recibió el doctorado Honoris Causa por la Universidad Veracruzana, con sede en Xalapa, México. En la década de 1980, Silvio se convirtió en uno de los músicos cubanos más demandados fuera de Cuba y recibió numerosos premios discográficos tanto en Cuba como en el extranjero. En 1985, la prensa italiana le concedió en San Remo el Premio Luigi Tenco, así mismo el Consejo de Estado de la República de Cuba y otras instituciones le otorgaron la Distinción por la Cultura Nacional, la Medalla Alejo Carpentier, la Orden Félix Varela de Primer Grado, la Orden Julio Antonio Mella y la Medalla Raúl Gómez García. El 21 de mayo de 2014 recibió el premio Barnasants 2014, entregado por Pere Camps, creador de este festival de canción de autor (de los más importantes de Europa) en 1996 y su director desde entonces. El 11 de marzo de 2015 le fue entregado en la sede la Sociedad Cultural José Martí el reconocimiento "La Utilidad de la Virtud", por su labor en defensa de los valores de la nación cubana y la divulgación del pensamiento del Apóstol.
La Voz de Michoacán
