Notimex / La Voz de Michoacán Ciudad de México. Un grupo de arqueólogos descubrió restos de un mural y diversos materiales en la Plaza de las Columnas, que indican que la élite de la cultura maya residió en la ciudad prehispánica de Teotihuacán, ubicada en el noreste de la Ciudad de México. Los materiales, que incluían fragmentos de cerámica maya y una rica ofrenda de consagración y un depósito compuesto por miles de restos óseos humanos de individuos sacrificados, fueron hallados en esa zona, ubicada entre las pirámides del Sol y la Luna, al oeste de la Calzada de los Muertos. El Instituto Nacional de Antropología (INAH) destacó que con esos hallazgos se confirma la relación entre las dos culturas que geográficamente se encontraban separadas por mil 300 kilómetros. “Textos epigráficos localizados en urbes como Tikal, en el Petén guatemalteco, refieren el contacto que ambas culturas sostuvieron hacia el siglo IV de nuestra era. Sin embargo, poca evidencia de la misma se había encontrado en la gran metrópoli del Altiplano mexicano, hasta hoy, donde nuevos hallazgos apuntan a la residencia de la élite maya en La Ciudad de los Dioses. El equipo de arqueólogos dirigidos por los doctores Saburo Sugiyama, Verónica Ortega Cabrera, Nawa Sugiyama y William Fash partieron de la hipótesis de su importancia para la organización política de Teotihuacán, en la medida que ahí se desarrollaban actividades para su control.