Detrás de mi nombre, el libro que llevó a Alexandra Castrillón a obtener el Premio Isabel Allende

Yazmin Espinoza / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán.- Alexandra Castrillón tomó, hace un par de años, una decisión que le cambió la vida; renunciar a su profesión como ingeniera en sistemas y dedicarse a su pasión más grande, la escritura.

Tras decretarlo y dar el salto al vacío, la colombiana ha sorprendido al mundo editorial con tres novelas que han encantado al críticos y lectores de todo el mundo. 

Su segunda novela “Detrás de mi nombre”, fue galardonada con el Premio Isabel Allende al libro más inspirador de ficción (medalla de plata) por el jurado de International Latino Book Awards 2022. Asimismo, en 2021, la autora había recibido el mismo galardón por su primera novela “Me muero por vivir”, convirtiéndose en la primera escritora en obtener dos veces este reconocimiento.

El Premio Isabel Allende fue creado como reconocimiento a la autora latinoamericana más vendida a nivel global y se otorga a aquellos libros que presentan una historia inspiradora para los lectores. A la fecha, siete autores han recibido este galardón.

“Detrás de mi nombre” es una novela contemporánea en la que se tocan tres temas: la búsqueda de la identidad, la salud mental y el cuestionamiento de las imposiciones sociales, enmarcados en un recorrido por México, Colombia y Argentina. Es la segunda publicación de Alexandra Castrillón Gómez, quien actualmente escribe en su quinta novela.

En entrevista para La Voz de Michoacán, Alexandra comparte sobre el proceso creativo de "Detrás de mi nombre", y el cambio que le dio a su vida el decidirse a seguir la profesión que le apasiona rodeada de letras.

Cuéntame sobre la historia que el lector puede encontrar en “Detrás de mi nombre”.

Es una novela de ficción literaria contemporánea que se enmarca en una historia que toca tres temas. Hablamos de salud mental, también de la búsqueda de la identidad y de la imposición de las cuestiones sociales. En esta novela Andrea, una mujer de 30 años, descubre que todo su pasado era una mentira. Su papá la saca de Colombia cuando tenía cinco años y la trae a vivir a México, donde ella se crea una idea de lo que era su vida y su familia, pero cuando su papá muere, descubre que nada de eso era cierto. Así que emprende una búsqueda de su identidad regresando a Colombia, pero en realidad lo que encuentra es que la verdad es muy dura. Decide huir de ese pasado y se va a Argentina, pero lo que va pasando en cada uno de estos países es también que va asumiendo distintas identidades. Cuando llega a Colombia descubre que su nombre era Diana, cuando se va a Argentina decide cambiarlo a Paulina, y ahí también hay un juego con el título del libro y lo que ella va descubriendo en estos lugares.  Sin embargo, como nos pasa a todos en la vida, nadie puede huir de su pasado, y ella tiene que sanar esas heridas para realmente proyectarse como esa mujer que sueña ser.

Búsqueda de la identidad, salud mental, ¿cómo fue la preparación del personaje para poder expresar de manera tan puntual su depresión, su ansiedad y desesperación?

Fue un proceso muy profundo para mí y conté con el apoyo de una psicóloga que me ayudó a tratar el tema desde un punto con mucho amor, no desde el punto de vista técnico, si no más desde lo humano. Y todo lo que implica darle el nombre correcto a cada una de las situaciones sin entrar en temas que de pronto sea amarillistas, que siento que a veces nos falta mucho en las conversaciones cotidianas cuando hablamos de salud mental. Tristemente aún hay mucha estigmatización y algunas personas se sienten limitadas de contar que están pasando por un problema o yendo a terapia. Y siento que lo que necesitamos es que haya estas conversaciones más abiertas que hacen parte de los procesos del ser humano y que está bien pedir ayuda cuando es necesario. Algo que hablamos mucho para la construcción del personaje fue que al principio Andrea cree que todo se soluciona con una pastilla, si no puede dormir, si necesita adelgazar, y esto la va llevando también por un camino de adicción porque todo lo quiere inmediato y busca el camino fácil, y también se va a dando este proceso de que aprende que las soluciones no son mágicas y se necesita mucho más que un producto comercial para resolverlo todo. Creo que es muy importante este círculo de apoyo que con ella se da principalmente a través de los amigos, y que muchas veces, pensamos que no hay nadie ahí, y quien menos esperas termina siendo la persona que te salva. Creo que siempre hay ángeles que nos pueden ayudar si estamos dispuestos a pedir ese apoyo.

¿Cómo fue el proceso de crear personajes con tantos claroscuros?

Para mí eso era super importante, y es que los lectores y lectoras sientan que los personajes puedan ser su primo, su tío o ellos mismos. Y definitivamente esto se logra entendiendo que todos tenemos matices, que no hay alguien que sea bueno o malo totalmente, las circunstancias de la vida nos afectan y nos llevan a tomar ciertas decisiones. Así que en mí caso, y en particular para esta novela comencé a crear a los personajes a través de un test de 16 personalidades en donde justamente leí y vi cuál consideraba mejor para cada uno. Y esto lo empecé a complementar, porque no quería que fueran tampoco estereotipos, fui añadiendo detalles, como el tic de Andrea de comerse las uñas. Voy añadiendo capas que se combinan con su historia del pasado, y acá como escritora mi trabajo es entender muy bien cómo es que este personaje llega a este momento y comienza a tomar ciertas decisiones.

El libro en sí es un viaje también geográfico. ¿Por qué decidiste evocar estas ciudades, Medellín, Ciudad de México, Buenos Aires?

Siempre busco que en mis libros haya viajes porque es una de mis grandes pasiones y he tenido la oportunidad de visitar muchos lugares. En este sentido como el papá la saca del país y se la lleva a otro, tenía que encontrar espacios en donde esto fuera posible, y en los años 90, por eso me quedé en Latinoamérica. También que he tenido la oportunidad de vivir en Ciudad de México, así que lo conozco geográficamente y que me encanta. Y Argentina, aunque no he vivido ahí, es un lugar que he visitado mucho tanto por trabajo como por placer, creo que he estado como ocho o diez veces, así que tenía mucha información para ubicarme en las costumbres y personalidades de los nativos. Igualmente me cuidé de buscar personas locales que me ayudara a hacer una revisión porque la visión del extranjero siempre va a tener un sesgo, siempre va a estar atravesada por la distorsión de mi propia realidad y antecedentes, así que por más que yo allá vivido en Ciudad de México por muchos años, veo las cosas como extranjera. La verdad mi arma secreta para escribir es llamar a una amiga o amigo, porque nada como contar con otro ser humano para que te ayude con la retroalimentación. También en la parte de la pintura, un amigo me dio todo su apoyo en ese tema.

El arte también tiene un gran papel en la trama, ¿cuál fue la decisión detrás de este giro en la profesión de la protagonista?

Yo tenía claro en mi maquetación del libro que esa búsqueda de la identidad la iba a conectar a ella con el arte, esto tiene que ver también con el momento que yo estaba viviendo cuando escribí la novela. Fue en el 2020 que fue cuando abandoné mi carrera corporativa para dedicarme a ser escritora, así que también estaba en mi búsqueda de identidad. Tenía claro que era el arte, pero no sabía qué tipo, la música, la escritura, y recuerdo que iba un domingo montando en bicicleta y de pronto supe que era la pintura. Ya había definido que ella era diseñadora gráfica, entonces tuve que hacer cambios en algunas escenas de su infancia para intentar volcar todo hacía el dibujo y el arte estético. Pero esto es algo de lo que yo no sé nada, nunca he pintado, entonces un pintor me ayudó a revisar lo que yo escribía, porque hay un proceso también de ella de explorar diferentes tendencias artísticas hasta entender cuál era la que realmente la conectaba, en qué momento sentía que sus pinturas eran grises y luego el color, y cómo también se convirtió en una conexión con su pasado.

La novela tiene un final bastante inesperado, ¿sabías desde el principio cómo iba a terminar la historia o esta te fue llevando?

Cuando pienso en el proceso creativo de esta historia lo veo de una manera explorativa, yo soy de profesión ingeniera en sistemas, entonces soy muy estructurada y hago toda una planeación de mis novelas. Sin embargo, esta historia fue mucho más de exploración porque tenía claridad de los aspectos macro, pero no sabía aún cómo resolver ciertos detalles. Así que no, el final no estaba muy claro cuando comencé a escribirla. Sabía que el arte iba a ser muy importante y que ella necesitaba confrontar ese pasado porque no hay otra forma de sanar esas heridas, pero no sabía cómo iba a ser, y surgió en el proceso de escritura. Y ya con el trabajo de los borradore se fue puliendo porque, cuando llegas a ese final, tienes que devolverte para ver cómo has ido dejado a lo largo de la novela pequeñas pistas. El lector tiene que pasar por las pistas como desapercibidas, pero cuando llega al final, entenderá.

Recibiste el premio Isabel Allende a la novela más inspiradora, eres la primera autora que se lo lleva dos veces, también lo recibiste por “Me muero por vivir”, ¿cómo te sientes?

Ha sido muy emocionante porque el año pasado mi primera novela ganó este premio y para mí, que he sido una autora autopublicada, independiente, que prácticamente todo lo hago yo, fue muy lindo recibir el premio que se otorga al premio más inspirador de ficción. Lo otorga justamente la Internacional book awards que es el reconocimiento más importante a los escritores latinoamericanos en Estados Unidos. Así que fue una emoción desbordante porque era mi primer premio literario en una carrera que elegí después de los 40. Sin embargo, cuando surgió la posibilidad de volver a postularme con “Detrás de mi nombre”, tuve muchas dudas porque pensé cuál era la probabilidad de volver a ganar. Aunque justamente mi propósito como escritura es inspirar a mis lectores. Así que volví a postularme, aunque creí que la probabilidad era nula, y cuando se anunció el premio fue increíble recibirlo de nuevo y ser la única escritora mujer que lo ha recibido dos veces. Es la oportunidad de que muchas personas más conozcan mi trabajo y se cumpla justamente mi propósito.

Me mencionabas que antes te dedicabas a otra cosa y lo dejaste todo por escribir, cuéntame un poquito sobre tus razones detrás de esta decisión.

Siempre digo que esta decisión se tardó 40 años pero que en realidad tomé en un segundo. Yo quería ser escritora desde siempre. Sin embargo, me gradué del colegio y empecé la universidad a los 15 años, así que decidir qué vas a estudiar a esa edad fue difícil. Además, están las presiones sociales que te dicen que quién vive de escribir y yo tenía habilidad matemática así que elegí una carrera con ese corte, pero nunca me desvinculé de la escritura. Tomé talleres, pasé toda la universidad en el periódico estudiantil, en círculos de escritores y todo lo que tuviera que ver con literatura, adelanté estudios en hermenéutica literaria cuando me gradué de sistemas. Así que esa decisión se venía gestando por mucho tiempo, pero tenía mucho miedo, el principal era el miedo a ser juzgada, qué iban a pensar las personas de mí y de mis libros, si no era tan buena. Ese síndrome de la impostora era lo que me mantenía atada a esa vida corporativa, pero en 2017 dije ya, no voy a esperar a estar muerta para arrepentirme por no dedicarme a lo que quiero hacer, y tomé la decisión. Sin embargo, el momento de saltar al vacío fue en enero de 2019, escribí este año voy a escribir mi primera novela pase lo que pase. Así que fue la decisión de un segundo, porque no importa cuánto tiempo llevas gestando algo, es el instante cuando tomas acción que se materializa. Seguí con mi trabajo corporativo un año más, pero vi que mi escritura estaba funcionando, publiqué mi primera novela y me fue muy bien y dije ya, esta es mi nueva identidad, solo que sin cambiarme el nombre como Andrea.

Cuéntame sobre este trabajo que haces ahora también con otros escritores para ayudarlos a darle vida a sus historias.

Ha sido muy lindo porque surgió de las personas que empezaron a preguntarme. Recibía tantas preguntas sobre cómo empezar a escribir y autopublicar y pensé que en realidad todo lo que había aprendido era algo que podía compartir con los demás. Así que comencé a crear estos programas para escritores y escritoras y ha sido un camino super lindo porque uno cuando enseña aprende, y es repensar muchas cosas también. Además, decidí que quería enforcarme en esa mentalidad de ser escritor, más que con la escritura creativa. Hay muchos cursos de escritura y todavía sigo participando en muchos, sin embargo, no siempre te enseñan cómo preparar tu mentalidad para fomentar el hábito de la escritura, o cómo te preparas para hacer las cosas con miedo, pero tener la valentía para saltar al vacío, cuando la gente te da una reseña negativa, cómo te preparas para conectar con los lectores, así que mis programas se enfocan más en estos aspectos.

Sin darnos muchos spoilers, ¿qué letras e historias hay en tu futuro?

Yo sí puedo contar todo (risas). Yo en cada proyecto pienso en retarme como escritora, porque ya que empecé esta carrera tardía, necesito que cada novela me ayude a ser mejor. Luego de “Detrás de mi nombre” publiqué “Entre redes” y ahí mi reto era la técnica narrativa porque combino narradores en primera y tercera persona. Escribí una cuarta novela que se llama “Encontrándome”, que por ahora está en proceso editorial y ahí quise pensar en escribir una trilogía, sin embargo, cuando la terminé pensé que lo que iba a unir estos libros tiene mucho más que ver con el tema que con la trama. La quinta que estoy trabajando ahora por el momento se llama “Nos pasa a todas”, porque odio que el proyecto se llame Libro 5. Su tema es la sororidad y el poder de las mujeres que apoyarnos mutuamente, redescubrir el valor de ser mujer, un poco las desventajas y discriminaciones en los países latinos. Así, esta novela es sobre esta chica privilegiada que se empieza a dar cuenta de que lo que ha renegado de su vida la conecta con quien realidad todos sufrimos, la discriminación, tanto porque la vivimos como cuando la ejercemos. Y porque normalizamos muchas cosas que no deberían de ser normales por más que sean comunes.

Conoce a Alexandra Castrillón

Alexandra Castrillón Gómez es ingeniera de sistemas y adelantó estudios en Hermenéutica Literaria. En 2020 dejó una exitosa carrera corporativa de veinte años en gerencia de proyectos y mercadeo para dedicarse por completo a la escritura. Sus primeras novelas fueron autopublicadas y han estado en la lista de las más vendidas de Amazon en varias oportunidades. Sus libros se distribuyen en Colombia a través de la Asociación Colombiana de Librerías Independientes (ACLI), en Amazon en dieciséis territorios y en nueve países de Iberoamérica en la modalidad de impresión bajo demanda.

A la fecha la autora ha publicado tres historias:

ME MUERO POR VIVIR

Una novela sobre el amor, los viajes y la enfermedad. Pablo inicia un viaje alrededor del mundo para cumplir el sueño de Sofía, su esposa, quien ha sido diagnosticada con una enfermedad degenerativa y poco común. Apegado a la comodidad de su vida en Colombia, tendrá que enfrentarse a los desafíos de ser un viajero independiente en su ruta por África y el sudeste asiático. Sofía sufrirá una enfermedad que cada día le arrebata el control de su cuerpo, retándola a dejar atrás los paradigmas sobre los que ha construido meticulosamente su vida. Durante el año que dura el viaje de Pablo, anhelará descubrir el mundo a través de los ojos de su esposo, pero en la medida en que crece la distancia también se incrementará el vacío emocional entre los dos.

DETRÁS DE MI NOMBRE

Una novela sobre la búsqueda de la identidad, la salud mental y el cuestionamiento de las imposiciones sociales. Andrea anhela formar la familia perfecta para llenar el vacío de crecer sin su mamá y la culpa de haber causado la muerte de su papá y de su hijo. Luego de fracasar en su matrimonio, se embarca en la reconstrucción de su pasado, intentando descubrir los motivos por los que fue sacada de su país cuando era niña. Las situaciones no resueltas la perseguirán amenazando la vida de quienes ama, llevándola a escapar y empezar de nuevo, para finalmente aprender que no hay lugar en el que pueda esconderse del dolor que carga en su corazón.

ENTRE REDES

Una novela sobre el amor contemporáneo, la manipulación y las segundas oportunidades.

@jotaescritor y @marcelinda90 se conocen a través de Instagram. Los mensajes que comparten y la dinámica que se va volviendo más íntima los llevan a convencerse de que el otro es la persona perfecta. Sin embargo, la identidad de la que se enamoran no es más que la que decidieron construir para las redes sociales. Esta novela contemporánea tiene como tema central la ficción que creamos para ocultar nuestras inseguridades, exponiendo la vulnerabilidad que justamente queremos proteger cuando intentamos estar a la altura de las expectativas de los demás. Descubre qué oculta cada uno y acompáñalos a responder la pregunta más importante de su vida: ¿quién soy realmente?