El Museo de Arte y Diseño de Nueva York (MAD) inauguró hoy una exposición que destaca la dimensión transnacional de varios modelos de creación artística generados en México y otros países latinoamericanos, que vinculan a diseñadores internacionales con artesanos locales. Titulada “Nuevos territorios: laboratorios para el diseño, las artesanías y el arte en América Latina”, la exposición resalta que este nuevo modelo de cooperación entre la tradición y la vanguardia tiene “una particular resonancia en ciudades como México y Oaxaca”. Lowery Stokes Sims, curadora en jefe de la muestra, se dijo sorprendida por el número de diseñadores que han decidido trabajar en México con comunidades indígenas para producir su trabajo, y que se interesan incluso en revivir formatos relegados por el mercado. “En México hay un gran respeto por al arte folclórico e indígena, y al mismo tiempo creo que existe ahora una toma de consciencia de que se puede colaborar con estas comunidades para moverlas hacia el futuro e involucrarlas en un diálogo global sobre el diseño y las artesanías”, dijo Sims. En entrevista con Notimex, la curadora asentó que pudo haber escogido varias otras ciudades para representar a México en la exposición, pero que Oaxaca ha generado dos proyectos de colaboración destacados entre artistas globales y artesanos locales: Colectivo 1050° y Oax-i-fornia. “Estas son tendencias que me interesan mucho, que cruzan fronteras y que juntan a la gente para crear un nuevo territorio en el cual realizar su oficio”, consideró Sims. La artista mexicana Liliana Ovalle, radicada en Londres, colaboró con el Colectivo 1050°, fundado en 2010 para adaptar artesanías oaxaqueñas de barro negro a usos contemporáneos, con el fin de hacer piezas con este material. Mientras tanto, el artista venezolano Raúl Cabra, radicado en la ciudad estadounidense de San Francisco, colaboró con artesanos oaxaqueños para realizar lámparas de carrizo, en una iniciativa titulada Oax-i-fornia. Sims resaltó que es común que artistas colaboren o aprendan oficios de “comunidades marginales”, pero usualmente explotándolas, apropiándose de conocimientos y exponiéndolos en galerías sin dar el debido crédito a los artesanos. “Pero estos artistas mantienen un sentido ético y eso fue lo que me atrajo de su trabajo, que ellos sabían que tenían una responsabilidad con sus colaboradores, y que era importante respetar eso”, afirmó Sims. En ese sentido, María Magdalena Ángeles, artesana de la comunidad oaxaqueña de Santa Cruz Papalutla, y colaboradora de Oax-i-fornia, declaró que ella ha hecho artesanías de carrizo desde los siete años de edad, pero que esta es la primera vez que sale de México a mostrarlas. “Mucha gente va a Oaxaca sólo con un boceto o una muestra de un objeto, y terminamos siendo sólo mano de obra, lo que no es justo, porque muchas veces ni siquiera nos pagan lo que vale el trabajo”, indicó otra colaboradora de Oax-i-fornia, Sarahí García. García aseveró que con el diseñador Raúl Cabra había sido diferente, y que las lámparas que ahora hacían era una colaboración entre equipos de diseñadores de San Francisco y artesanos oaxaqueños, que no estaban limitados a hacer sólo los diseños tradicionales que hacían sus antepasados. “A eso en Oaxaca le llamamos Guelaguetza, que significa que ellos aportan un conocimiento y nosotros aportamos otro, y entre los dos hacemos algo. Guelaguetza es colaboración, sin envidias. Ahora es para algo muy bello, nuevo, pero que no pierde su forma tradicional”, sostuvo García. Abierta al público del 4 de noviembre al 6 de abril de 2015, “Nuevo territorios” incluye obras de 77 artistas de América Latina, o radicados en la región, entre los que destacan una docena de diseñadores mexicanos. Además de Oaxaca y México, la exposición resalta modelos de trabajo y diseño de otras cinco ciudades o grupos de urbes latinoamericanas: Caracas (Venezuela); Sao Paulo-Río de Janeiro (Brasil); Santiago-Buenos Aires (Chile-Argentina); San Salvador-San Juan (El Salvador-Puerto Rico), y La Habana (Cuba).
La Voz de Michoacán
