Con motivo del 70 aniversario luctuoso de Ana Frank, un canal de televisión por cable estrenará el próximo domingo el documental especial de dos horas “Los últimos días de Ana Frank”. En un comunicado, el canal “National Geographic” informó que el trabajo busca recrear la espantosa imagen de lo que le sucedió a la familia Frank después de ser arrestada y llevada a Auschwitz, luego de una breve estadía en Westerbork, un campo de tránsito. Por medio de fotografías y videos históricos, sumados al testimonio de testigos presenciales y sobrevivientes de los campos de concentración que conocieron a Ana, la narración histórica espera retratar aquella parte que se le escapa al famoso libro. Hanna Pick, de 80 años, y Nanette Konig, de 84 años de edad, una amiga de infancia de Ana y uno de los sesenta mil internos de Bergen-Belsen que fueron liberados por los británicos, son dos de los personajes entrevistados que permiten concretar este proyecto. Según el canal, Nannette Koing describió cómo era Ana Frank cuando la conoció en el Liceo Judío en 1941. “Ana era muy vivaz. Le encantaba hablar. Le gustaba que la miraran y la escucharan...”. De acuerdo con la biografía que publica el portal oficial de Ana Frank “annefrank.org”, la joven judía nació el 12 de junio 1929 en la ciudad alemana de Fráncfort del Meno, donde la familia de su padre vivió por varias generaciones. La crisis económica, el surgimiento de Hitler (1889-1945) y el creciente sentimiento antisemita en la sociedad pusieron fin a la tranquila vida de la familia, por lo cual Otto Frank (1889-1980) y Edith (1900-1945), su esposa, decidieron, como muchos otros judíos, dejar Alemania. La familia reconstruía su vida en Ámsterdam, Ana y su hermana Margot (1926-1945), que es sólo tres años mayor que ella asistían a la escuela, mientras su madre se dedicaba al hogar y su padre montaba una empresa. Cuando la amenaza de la guerra en Europa aumentaba, Otto Frank intentó emigrar con su familia a Inglaterra o a Estados Unidos, pero dichos intentos fracasaron, la Segunda Guerra Mundial estalló en 1939 aunque la familia mantuvo la esperanza de que los Países Bajos quedaran libres de la marcha nazi. El texto biográfico recuerda que el 10 de mayo de 1940, tropas alemanas invadieron Países Bajos, el gobierno se rindió y los alemanes se apoderaron del país, imponiendo medidas antijudías que propiciaron que Ana y Margot sólo fueran recibidas en una escuela exclusiva para judíos. Otto perdió su empresa. Después de otro fracaso por emigrar a Estados Unidos, Otto y Edith Frank decidieron esconderse en la casa de atrás del edificio donde funcionaba su fábrica. Otto preparó un refugio para esconderse, para ello recibió la ayuda de Hermann van Pels (1898-1945), Johannes Kleiman (1896-1959) y Víctor Kugler (1900-1981). El 5 julio de 1942 llegó un citatorio por correo para Margot Frank, donde se le indicaba que debía trasladarse a un campo de concentración en Alemania, por lo cual la familia Frank pasó a la clandestinidad. Una semana más tarde se agregó la familia Van Pels y, en noviembre de 1942, llegó el octavo escondido, el dentista Fritz Pfeffer (1889-1944). Durante más de dos años permanecieron escondidos en la “Casa de Atrás”. Cuentan que recibían la ayuda de los empleados de oficina Johannes Kleiman, Víctor Kugler, Miep Gies (1909-2010) y Bep Voskuijl (1919-1983), quienes proporcionaban comida, ropa y libros a los escondidos, y también son su contacto con el mundo exterior. Poco antes de tener que esconderse Ana recibió de regalo de cumpleaños, un diario personal en el que comenzó a escribir inmediatamente. Durante el periodo en que estuvo escondida, Ana escribió sobre lo que ocurría en la “Casa de Atrás” y sobre sí misma. Cuando el ministro de Educación neerlandés hace un llamado, a través de la radio inglesa, para conservar los diarios escritos durante la guerra, Ana decide elaborar el texto de su diario para convertirlo en una novela a la que llamará “La Casa de Atrás”. Ana comenzaba con la reescritura, pero antes de terminar fue descubierta y arrestada. El 4 de agosto de 1944, los escondidos fueron arrestados, junto con los ayudantes Johannes Kleiman y Victor Kugler y trasladados a los terriblemente célebres campos de concentración. Inmediatamente después de la detención, Miep Gies y Bep Voskuijl rescatan las hojas del diario de Ana, que han quedado en la Casa de Atrás. Ana murió hace 70 años, el 12 marzo de 1945, víctima de tifus, pocos días antes de que el campo de concentración donde se encontraba recluida fuera liberado. Otto Frank es el único de los ocho escondidos que sobrevivió a la guerra, tras enterarse de la muerte de toda su familia regresó a Ámsterdam, donde Miep Gies le entregó las hojas del diario de Ana. Otto leería el diario, encontrando a una Ana muy distinta de la que conocía. Quedó muy impresionado. Dos años después de que terminó la guerra, Otto Frank publicó el diario bajo el título “La casa de atrás”, convencido por sus amigos de la gran elocuencia del texto. Ana Frank escribió en su diario que quería ser escritora o periodista, y que quería editar su diario en forma de novela, sueño que finalmente le fue concedido.