Rita Gironès Nació en el sur de Rusia, entre Ucrania y Chechenia, y pronto cumplirá 30 años de residir en tierras mexicanas. La artista visual e investigadora de las formas y las texturas considera que son muy distintos el arte gráfico de México y el de su país de origen. La enseñanza, la colaboración con otros grupos académicos, el desarrollo de su propia producción artística, la escritura y publicación, las conferencias, Ioulia es una constelación inagotable de veredas artísticas. “Yo estudié en los 90, soy niña de la perestroika”. Atesora proyectos de un pasado familiar que todavía permanecen encriptados hasta ver la luz. “En este mundo no es posible cerrar los ojos, cegarnos frente a los daños colaterales que propician tantos enfrentamientos”, comenta. Cambiar el mundo es complicado, pero cambiar la consciencia es posible. Entonces, sumemos consciencias renovadas, logremos un hábitat distinto. “Todos los artistas hablamos, directa o indirectamente, de nosotros mismos”, ponemos nuestra historia al descubierto. ¿Qué querías ser de niña? Cuando yo tenía 8 años, una maestra de primaria nos preguntó qué queríamos ser de mayores. Yo dije: artista y maestra. Y entonces ella me dijo, ¡pero no vas a poder hacer las dos cosas! Después de muchos años me acordé de eso y, ya ves, terminé siendo estas dos cosas. ¿Qué quieres ser ahora? Quiero seguir haciendo proyectos que propicien una conciencia en la sociedad. Sentirme satisfecha conmigo misma y con mi conciencia, hacerlo lo mejor posible, visual y técnicamente, y presentarlo al mayor público posible. ¿Cuál es la parte que más te gusta de tu trabajo? Sin duda la producción artística. Principal rasgo de tu carácter. Soy bastante dura, con los demás y también conmigo misma. ¿Cómo relacionas el arte con la vida? Es un condimento importantísimo de todas las personas, aunque muchos no se den cuenta de esto. Muchas personas no tienen la conciencia de lo que significa o no el arte, pero debemos aprender que existe en todo lo que nos rodea: un parque bello, una exposición, una ropa fina, la artesanía en México que, por ejemplo, está presente en todos lados, etc. ¿De qué sirve el arte en mundo como el de hoy? Es necesario dar valor a las culturas populares. Las personas no podríamos vivir en un espacio blanco y pulcro, vivir sin apego a la belleza artística. El artista tiene conciencia y elabora su propio discurso. Mi casa parece un museo y en cualquier esquina es como un bombardeo constante visual y te obliga a pensar, tu cerebro trabaja ahí constantemente. A muchos estudiantes les tienes que abrir los ojos, les digo: mira las proporciones, observa la combinación de estos colores, ¡los juegos de textura en tres tipos de piedra del pavimento! A mí me inspiran muchas cosas y veo de trasmitir eso, hablar, explicar, dar conferencias, ponencias, no sólo a la comunidad académica, sino al público en general, a los niños, y entonces captas dos, tres ojos que brillan entre el público. Todos necesitamos del arte y, afortunadamente, hoy tenemos acceso a él a través de programas académicos accesibles. Tu visión de mundo artístico, ¿es más poética o política? Contiene ambas. Aunque yo insisto en crear desde lo poético, también es político. Yo trabajaría en proyectos políticos, siempre y cuando fuera desde lo personal. Te contaré algo: mi abuela trajo un pedazo de velvet rojo de Praga y luego mis tres niñas usaron el vestido con esa tela que les hizo mi mamá en México. Somos todos nuestros proyectos, fotografías, memorias, toda nuestra formación, nuestra infancia, razonamos a partir de ello: no podemos negar lo que hemos vivido. Mi arte es político y poético. ¿Con qué personaje histórico te gustaría a sentarte a platicar? Con muchísimos: con el escritor Mijaíl Bulgakov, con el director Andréi Tarkovski o las poetas Anna Ajmátova y Marina Tsvetáieva. También con el político Mijaíl Gorbachov. Como creadora artística, ¿sientes más afinidad con el arte del pasado, del presente o del futuro? Te diría con el arte actual, pero no existiría el arte de hoy sin el arte del pasado. Son lenguajes muy complejos, los artistas dominan muchas técnicas y parece que los recursos plásticos, técnicos, tienen cada vez mayor relación con las ideas y los conceptos contemporáneos. Hoy para crear proyectos pueden usarse muchos recursos y lenguajes distintos. Y lo que importa es llegar, no sólo se trata de expresar algo, tenemos que practicar un diálogo constante para llegar a las personas. ¿Qué cualidad admiras en las personas, y cuál detestas? Admiro la honestidad de los demás y no soporto la hipocresía. ¿Qué música escuchas cuando estás inmersa en tus procesos creativos? Música clásica o lounge. ¡Desde Mozart hasta cumbia contemporánea colombiana! (Risas) Depende del humor, pero que sea buena música y me permita inspirarme. ¿Pensaste alguna vez en dedicarte a otra cosa, en tirar la toalla? A veces cuando mis estudiantes me decepcionan, o cuando los proyectos no salen como yo quisiera, sí me dan ganas de quedarme en casa y hacer pan y mermeladas. A veces mi cerebro, mi organismo, me dice: haz una pausa. Pero son momentos. Aunque no descarto en algún momento cultivar mis propios alimentos y hacer mermeladas. (Risas) ¿De qué te sientes orgullosa? De los estudiantes que han logrado algo. ¿De qué te arrepientes? Siempre he salido adelante. Probablemente con mayor madurez no hubiera hecho muchas cosas, pero necesité vivirlas para precisamente obtener esta madurez. No me arrepiento de nada. He vivido experiencias dolorosas y drásticas, pero que me han hecho la mujer que soy ahora. ¿Qué harías si fueras millonaria? Un fondo cultural, una biblioteca, un museo, un centro cultural… Tendría los recursos necesarios para poder fomentar la cultura. ¿Qué es para ti la Cultura, Ioulia? Es “parte permanente de” y “herramienta para”. La primera porque engloba cultura popular, arte popular, tradiciones, en definitiva, conforma una flor con muchos pétalos. La segunda porque genera conciencia y establece un diálogo, une y forma a las personas. Rita Gironès, escritora, docente y artista escénica. Catalana y mexicana. Lleva 20 años residiendo en Michoacán trabajando activamente por la cultura. Apasionada de las Humanidades, obtiene el Premio Nacional de Dramaturgia en México, 2022. Facebook: Rita GironèsInstagram: ritagirones