Pinocho de Guillermo del Toro, madera de gran actor

Una historia que parte de la novela de Collodi y que se sumerge en el imaginario, las obsesiones, el universo y los mitos fundacionales del amplio y particular mundo que habita y transforma en poderosas imágenes en la pantalla Guillermo del Toro.

Jaime Vázquez

No es que Carlo Collodi, autor de la novela que conocemos como Las aventuras de Pinocho dijera mentiras y le creciera la nariz, pero se llamaba en realidad Carlo Lorenzo Filippo Giovanni Lorenzini. Su famoso libro, publicado primero por entregas en el periódico para los niños Il Giornale per i Bambini, entre el 7 de julio de 1881 y el 25 de enero de 1883, se tituló originalmente Storia di un burattino (Historia de un títere). Collodi tampoco mintió. Finalmente, se editó completo ese mismo año, ya con el nombre con el que conocemos al libro y al pequeño muñeco de madera.

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Collodi nació en Florencia, hizo periodismo, escribía notas políticas antes de dedicarse a las historias infantiles. Se dice que no le gustaba la compañía de los niños.

La historia del muñeco de madera que se aparece primero como un rústico tronco testarudo al maestro Cereza y más tarde llega a la casa de Gepetto, que ya con forma de títere busca su propia identidad en un mundo que no comprende y tropieza con insólitas aventuras entre personajes buenos y malos que lo llevan por caminos desconocidos para un alma inocente, con todo y su moraleja decimonónica, se convirtió con el tiempo en un clásico de la literatura universal y un tema infinito para el cine.

Recordemos algunas apariciones de Pinocho como estrella del cine. En 1940, los Estudios Disney entregaron su versión de la novela, una cinta que se convirtió en referente para muchas generaciones. Fue el segundo largometraje de dibujos animados del sello Disney, con un doblaje al español dirigido por Luis César Amadori en los estudios Argentina Sono Films. Luigi Comencini adapta y dirige para la televisión su Pinocho en 1972. En 1986 el argentino Alejandro Malowicki lo convierte en comedia musical. Jonathan Taylor Thomas da vida a Pinocho y Martin Landau a Gepetto en la versión de Steve Barron, de 1996, que tendrá una segunda parte en 1999. Roberto Benigni dirige y protagoniza otro Pinocho en el cine en 2002. Un muñeco convertido en robot se transforma en Pinocho 3000, cinta de ciencia ficción dirigida por Daniel Robichaud en 2004. Robert Zemeckis le da el papel de Gepetto a Tom Hanks en su Pinocho de 2022. Mucho del muñeco tiene la serie manga japonesa llamada Átomo, el brazo poderoso, y que conocimos como Astroboy, creada por Osamu Tezuka en 1953, producida en Japón para la televisión en 1963 y llevada al cine en 2009 bajo la dirección de David Bowers.   

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En diversas ocasiones, Guillermo del Toro expresó su deseo de convertir en realidad el viejo proyecto personal de realizar su propia versión de Pinocho. El resultado es una historia que parte de la novela de Collodi y que se sumerge en el imaginario, las obsesiones, el universo y los mitos fundacionales del amplio y particular mundo que habita y transforma en poderosas imágenes en la pantalla Guillermo del Toro.

Estrenada recientemente, Pinocho de Guillermo del Toro tuvo que sortear diversos retos para su exhibición en salas. Disponible en la plataforma Netflix, esta versión filmada en stop-motion (un espectacular trabajo de técnicos y creativos entre los que se encuentra El taller del chucho, estudio de animación con sede en Zapopan y fundado por el propio del Toro en 2020), sitúa la historia en la Italia fascista, en un mundo que caminaba en el filo, que vivía sobre el fuego de la Segunda Guerra Mundial.

Película con profunda visión sobre la muerte, el deber, la verdad, la otredad, la naturaleza humana, la búsqueda del padre y la razón del afecto filial, Pinocho de Guillermo del Toro ha obtenido diversos premios y reconocimientos internacionales, como ya es habitual en el cine de este realizador.

Entrega una nueva relectura de sus obsesiones, en la que la imperfección es un rostro de lo humanidad y la maldad humana es el verdadero monstruo.

En su película, del Toro prueba sin duda alguna que Pinocho tiene madera de gran actor. 

Jaime Vázquez, promotor cultural por más de 40 años. Estudió Filosofía en la UNAM. Fue docente en el Centro de Capacitación Cinematográfica. Ha publicado cuento, crónica, reportaje, entrevista y crítica. Colaborador del sitio digital zonaoctaviopaz.

@vazquezgjaime