Víctor Rodríguez Méndez Para Tamara Sosa Alanís, secretaria de Cultura del Gobierno de Michoacán, la situación que vive la administración cultural en estos momentos “no es tan negativa” como parece, pero sí complicada por la falta de recursos federales. Pese a reconocer estas dificultades presupuestales, la recientemente nombrada titular de cultura asegura que en lo inmediato se seguirá trabajando básicamente en el fomento del turismo cultural, apoyando los eventos del año pasado, en tanto que el restablecimiento de los apoyos como el programa de becas a artistas y los premios literarios, entre otros, dependerá del recurso federal que se pueda recuperar con su gestión ante la Federación. Para este año, a la Secretaría de Cultura se le asignó un presupuesto de 241 millones 766 mil 319 pesos, con un incremento de 27 millones 313 mil 611 pesos respecto al de 2022 que fue de 214 millones 452 mil 708 pesos; es decir, un 12.74 por ciento más que el ejercicio pasado. Muy lejos, sin embargo, de los 367 millones 341 mil 978 pesos que tuvo la Secretaría de Cultura en 2014, con Fausto Vallejo en la gubernatura, el más alto en los últimos doce años. El presupuesto de 2023 se hizo posible, según lo señaló el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla en el Proyecto de Presupuesto de Egresos para el Ejercicio Fiscal 2023 presentado al Congreso estatal, “bajo los principios irrestrictos de austeridad, honestidad, eficiencia, racionalidad y transparencia, principios que caracterizan los compromisos asumidos por el Gobierno de Michoacán y cuyos ejes centrales son el bienestar y el desarrollo de la población michoacana”. Sin embargo, la diputada de Morena en el Congreso de Michoacán María de la Luz Núñez Ramos señala en entrevista por separado que el presupuesto para cultura es “muy pobre”. Considerando el potencial de Michoacán y la historia, dice, “es muchísimo lo que se puede emprender”. Se requiere de “un esfuerzo importante para sumarlo al esfuerzo que está haciendo el gobierno federal”, agrega. Integrante de la Comisión de Cultura y Artes del Congreso local, Núñez Ramos refiere al presidente Andrés Manuel López Obrador: “Lo ha repetido en innumerables ocasiones. Dijo hace poco: «la gran riqueza de México, la gran reserva de recursos que tenemos en México reside principalmente en su enorme cultura ancestral». Si no valoramos eso como un detonante y simplemente tenemos una Secretaría con pocos recursos, que apenas le alcanza para el gasto corriente, es una pena”. La diputada del PAN Andrea Villanueva Cano, presidenta de la Comisión de Cultura y Artes de la actual LXXV Legislatura, fue contactada por este medio en diversas ocasiones para ser entrevistada sobre el tema presupuestal de cultura en Michoacán, y no respondió a la invitación. Turismo y cultura Egresada de la licenciatura en Lengua y Literatura Hispánicas de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo y ex asesora de Alfredo Ramírez Bedolla durante la LXXIV Legislatura del Congreso local, Tamara Sosa señala que la justificación de la austeridad presupuestal es que “venimos de tiempos en los que había muchísima corrupción y un manejo inadecuado de los recursos, entonces es natural que los gobiernos tanto federal como estatal estén buscando la manera de aprovechar mejor los recursos”. El caso de cultura no es la excepción, dice, “y lo que necesitamos es tratar de aprovechar lo mejor que podamos los recursos humanos y financieros de los que disponemos”. Tamara Sosa, secretaria de Cultura. Con un presupuesto asignado para este año ligeramente superior al del año pasado, ¿para qué le alcanza a la Secretaría de Cultura con lo asignado este año?, preguntamos. “Tenemos una serie de actividades ya planeadas”, responde Tamara Sosa. “Muchas de las que se vienen haciendo de manera histórica”. Y describe entonces que la Secretaría de Cultura volverá a ejercer presupuesto en la realización del festival artístico K´uinchekua, en el festival de marcas colectivas Michoacán de Origen, en el proyecto Casa Michoacán (con un proyecto “más cercano a la gente”, apunta), el proyecto Pátzcuaro, Patrimonio de la Humanidad y, en general, con el mantenimiento y conservación del patrimonio cultural, “que no es cualquier cosa y que está nuestro cargo”. Al respecto, María de la Luz Núñez Ramos puntualiza: “Hago un llamado muy respetuoso al gobierno estatal para hacer un esfuerzo extraordinario. Muchos rubros están bastante recortados, pero si desde el origen el gobernador asigna un presupuesto triste, no asigna un presupuesto considerable, pues es difícil poder ampliar”. María de la Luz Núñez, diputada. Y es que para la diputada morenista es importante no ver a la cultura como un accesorio ni como un objeto decorativo, sino utilizarla como el principal eje para recuperar lo que la violencia ha roto, según manifiesta. “Esto se hace con cultura, con semilleros creativos; con apoyar lo que se hace en cada pueblo. Hay que hacer un trabajo de tierra, que es lo que muchas veces a los que no están comprometidos les da flojera”. Para la fundadora del Frente Democrático Nacional y con un pasado ligado al Partido Comunista Mexicano el presupuesto debe alcanzar para lo que ella considera los cuatro grandes rubros de la cultura: 1) preservar lo que se tiene, lo que corresponda a la Secretaría de Cultura; 2) difundir lo que se tiene; 3) apoyar a las y los jóvenes creadores, pero también a los creadores eméritos, a la gente que ha dedicado toda su vida a la cultura; y 4) crear y formar nuevas audiencias. Sobre este último punto abunda en el sentido de que “la cultura, como cualquier gusto y como cualquier afición, se tiene que adquirir y fomentar”. Un escenario complicado Titular de la Secretaría de Cultura desde el 19 de diciembre del 2022, en sustitución de Gabriela Molina Aguilar –ahora secretaria de Educación–, Tamara Sosa asegura que en general “no es un escenario tan negativo” el que le toca enfrentar. “Tenemos varios proyectos y lo que podamos recuperar del recurso federal va a ser de mucha ayuda para diferentes acciones”. La ex secretaria de la Mujer en el estado en este mismo gobierno señala que desde algunos años, Michoacán no ha podido acceder a ciertos recursos federales por el “desorden administrativo del pasado”. Entonces, añade, “necesitamos acercarnos con la Federación para plantearles la situación en la que nos encontramos y la urgencia que tenemos de que nos ayude a salir de esta situación tan complicada en la que estamos, por no poder acceder a algunos recursos federales”. Incluso, declara, no desdeña buscar mayor contacto con el sector privado “que de repente se pueda interesar y nos pueda ayudar también a llegar a más personas”. Por lo pronto, la reactivación del programa de becas, los premios estatales de literatura o la Feria del Libro estatal tendrán que esperar, según lo precisa Tamara Sosa. “El recurso federal está vinculado totalmente al tema de las becas y a todo lo que significa el apoyo directo para las artistas y los artistas”. Y abunda: “La feria no es un tema que vayamos a retomar. Lo que queremos es fortalecer las diferentes ferias que hay al interior del estado y también nos estamos vinculando con la UNAM en torno a la Fiesta del Libro y la Rosa 2023, que es un proyecto en el que ya se participó y hay recurso estatal. Vemos que se puede fortalecer más ese espacio y podemos hacer un trabajo en conjunto para aprovechar mejor los recursos de tanto de la UNAM como de nosotros”. Sobre el apoyo a las casas de cultura en el interior del estado, Sosa Alanís lo ve también como un pendiente en cuanto a reactivar los Consejos Regionales de Cultura. “Queremos descentralizar un poco las actividades de la Secretaría y a través de la Dirección de Vinculación estamos planificando para no llevar acciones de aquí, sino fortalecer a todo el talento que hay al interior del estado y de esta manera apoyar a las casas de cultura, que son espacios propicios que tienen mucha identidad al interior de los municipios”. Agrega que esta parte va a depender mucho de las voluntades de las presidencias municipales, aunque también le apuesta a los espacios de los Centros de Integración para el Bienestar y la Armonía Social (Ceibas) en los que el gobierno estatal destina recursos importantes y aprovechar su infraestructura al interior del estado. —¿Hay una política cultural del Estado? —Es lo que estamos haciendo justamente. Es un tema que se ha dejado por muchos años, que no se le ha dado la importancia que se requiere. Estamos partiendo de una base firme que nos dejó la administración de la secretaria Gaby (Molina); nos dejó funcionando muy bien todo y eso nos permite dedicarnos a lo que viene de aquí en adelante. Tenemos una base sólida. Lo que queremos es eso precisamente, que podamos hablar de que en Michoacán hay una política cultural de estado. Y no, no habrá un documento que avale esta política gubernamental, aclara la actual doctorante en Ciencias Sociales y maestra en Historia de México, sino “más bien herramientas con las que podamos hablar de una estrategia en forma”. A pregunta expresa, Tamara señala que lo importante “es pensar en la cultura también como una herramienta de prevención, una herramienta que nos ayude a fortalecer las identidades regionales y que le dé otras opciones y visiones a la población, a la niñez, sobre todo, de lo que se puede hacer. Eso va a ser algo básico, a la par que desarrollar lo que ya se viene haciendo en torno al turismo, también voltear a ver a Michoacán como lo que es: una riqueza enorme en cuestión de cultura”. En este sentido, María de la Luz Núñez apunta: “La cultura es la herramienta más importante con que cuenta el estado, como ente político, para lograr el resarcimiento del tejido social que se rompe como un pedazo de tela por la miseria, la desigualdad y la violencia”. La cultura es un proceso que por propia naturaleza es colectivo, abunda la diputada. “No puede haber cultura de uno solo. La cultura está hecha para el disfrute de los demás; sobre todo, las actividades que necesitan ser comunitarias como la música, las artes visuales, la danza, las artesanías, como otras que tienen que hacerse en su conjunto, y además recibiendo, atesorando y transmitiendo el conocimiento de generación en generación”. “No estamos solas ni partiendo de cero” Tamara Sosa Alanís declara estar muy consciente del reto que significa estar al frente de la cultura en Michoacán, pero “tenemos mucho ánimo”, dice. “Hay un equipo muy echado para adelante. He estado recorriendo los diferentes centros culturales y museos y las oficinas que tienen que ver con la Secretaría y en todos los lugares encuentro a trabajadoras y trabajadores que quieren mucho a la institución, que quieren mucho el trabajo que hacen, y eso ayuda mucho. No estamos solas ni partiendo de cero, estamos retomando todo lo bueno que haya que retomar y viendo hacia adelante”. Respecto al acercamiento con la comunidad artística y cultural, Tamara Sosa dice que las puertas de la Secretaría “están abiertas” y está entre sus planes tener reuniones sectoriales. “Tenemos que tener claridad del panorama para ver qué les vamos a plantear una vez que tengamos esta comunicación con la Federación. Por supuesto que es prioritario para nosotros tener una comunicación directa con las creadoras y creadores”. Finalmente, la legisladora María de la Luz Núñez Ramos hace un llamado al gobernador a que escuche “a la comunidad, no sólo a los creadores de Morelia, a los que tienen acceso a medios, sino que también escuche a los creadores de culturas populares y comunitarias”, y a quien está en la titularidad de cultura le pide “sensibilidad suficiente para recorrer el estado y articular la enorme riqueza que hay”. Víctor Rodríguez, comunicólogo, diseñador gráfico y periodista cultural.