Ciudad de México.- El escultor mexicano Sergio Peraza Ávila trabaja en un busto del Premio Nobel de Literatura, Octavio Paz (1914-1998), el cual se sumará a una colección que pretende exhibir a finales de este año. Entrevistado en su taller, el artista plástico recordó que a lo largo de su vida ha plasmado en bronce a varias figuras, sobre todo literarias, que poco a poco han ido conformando una colección, y entre la que destacan bustos de Amado Nervo, Ítalo Calvino, etcétera. La idea es ahora tener todos esos trabajos unidos en una sala, todos esos rostros, sobre todo de literatos, “que es lo que voy a dejar para las siguientes generaciones de mexicanos”. “Me gustaría exponerlas donde cada año he presentado un busto, que es el Palacio de Minería, en el marco de la Feria Internacional del Libro, es decir, me gustaría que en una edición pudiera reunir toda esta colección”, añadió. En esta colección, abundó, no solamente ha plasmado figuras de la literatura, sino también tiene arqueólogos como Manuel Gamio, de hecho, dijo, el último Manuel Gamio que hizo está en el Templo Mayor. Al retomar el asunto del busto de Octavio Paz, Peraza recordó que falleció el Premio Nobel de Literatura Gabriel García Márquez (1927-2014), no tardó mucho en que le pusieran su busto y escultura en la Universidad de Colombia. “No es justo que en México no exista una Plaza dedicada a Octavio Paz, donde esté su busto y la escultura que estoy haciendo es con la intención de que quien la vea a la altura pueda platicar con él, es decir, cara a cara; habrá quien se inspire o recuerde su obra poética, pero sobre todo que sea un acercamiento al poeta”, afirmó. Se trata de “nuestro Premio Nobel de Literatura, que es una escultura que he empezado a plasmar, aún no la he terminado, llevo varios diseños y modelos para honrar la memoria de Paz. Comentó que a la fecha, algunas instituciones se han interesado en este trabajo, como el Colegio Nacional, y hasta la viuda Marie José Paz, que lo vio en una fotografía y se sorprendió del parecido. Para el escultor, lo que más le intriga al crear un rostro son los ojos porque, “como dicen los poetas, son las ventanas del alma, pues al ver una fotografía de un autor, uno lo recuerda, pero al verlo en escultura uno lo inmortaliza, así como lo hizo Auguste Rodin con los autores, escritores y compositores de su época que ahora se ven en su museo”. Cabe destacar que en 2010 expuso en uno de los lugares más emblemáticos para cualquier artista como es el Museo Louvre en París como el escultor mexicano latinoamericano invitado. “Hay una obra que se puede apreciar cualquier día del año que es maravillosa para el pueblo de Carmelita, porque está en Ciudad del Carmen, es una estatua de la virgen del Carmen que está a 26 metros del nivel del mar, frente al malecón; es de bronce y es una estatua única”, puntualizó el artista plástico. Finalmente, comentó que el consejo que les daría a las nuevas generaciones es el mismo que le dio su maestro Raúl Anguiano (1915-2006), siempre dibujar no quedarse ahora con la computadora, dibujar el trazo, eso es muy importante.
La Voz de Michoacán
