EFE / La Voz de Michoacán Madrid. Compañeros de profesión, amigos, representantes institucionales y cientos de admiradores acudieron hoy a la capilla ardiente de Verónica Forqué instalada en el madrileño Teatro Español para rendir homenaje y despedir a una de las actrices españolas más queridas y reconocidas por el público y por su gremio. El director Pedro Almodóvar, los actores Paco León, Aitana Sánchez Gijón, Maribel Verdú, María Barranco o Antonio Resines, entre otros, y representantes políticos como el ministro de Cultura, Miquel Iceta, pasaron por el velatorio, abierto desde las once de la mañana hasta las cuatro de la tarde. Casi todos recordaron a Forqué, un "mito" del cine español, por su sonrisa y su alegría, pero la tristeza y la conmoción fueron los sentimientos dominantes por la muerte de la protagonista de títulos como "La vida alegre", "Sé infiel y no mires con quién" o "Kika", que se quitó la vida el pasado lunes a los 66 años. El féretro con sus restos mortales llegó al teatro pasadas las 10.30 horas ante una gran congregación de cámaras y curiosos y se instaló en el escenario rodeado por ocho coronas de flores enviadas por el Ministerio de Cultura, la Academia de Cine, la productora El Deseo, la SGAE, compañeros y amigos, mientras se proyectaban imágenes de la actriz en una gran pantalla. Almódovar, que contó con ella en películas como "¿Qué he hecho yo para merecer esto?" y "Kika", la recordó como "una actriz extraordinaria" y "una persona buenísima, una especie de ángel" y reconoció que era "la última persona" que se hubiera imaginado con este final. "La Verónica que recuerdo era una Verónica muy feliz y muy realizada tanto en lo profesional como en lo personal", aseguró y lamentó que el tiempo no la tratara bien tras la separación de su marido, el director de cine Manuel Iborra y el fallecimiento de su único hermano. "Yo pensaba que tenía armas más que suficientes para luchar contra estos problemas pero la realidad nos dice que no", declaró y se mostró reacio a admitir que "nadie haya podido hacer algo" para evitarle este final. El ministro de Cultura español, Miquel Iceta, quiso celebrar "la vida y obra" de Verónica Forqué, "testimonio del buen hacer y de toda una época" y pidió reflexionar sobre "qué tenemos que hacer entre todos para cuidarnos mejor", ser "conscientes de que a veces, las fuerzas no son suficientes para resistir" y es necesario la solidaridad del resto. En la misma línea, el actor Carmelo Gómez apuntó que esa frase que dijo Forqué al retirarse hace unos meses del programa "Masterchef Celebrity", "no puedo más", debe "hacernos reflexionar sobre en qué mundo estamos".