Juan Carlos Huante / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. El estratega del Atlético Morelia, Mario García Covalles, reconoció su “pecado” tras la derrota por goleada de 3-0 contra los Correcaminos, que antes de este partido se ubicaban en la última posición de la clasificación general del torneo Apertura 2024 de la Liga de Expansión. “Me apena, pero estos sucede porque intentamos ser más agresivos; si no se refleja, no se ve, el pecado es mío”, dijo el entrenador Rojiamarillo, quien también aceptó que el partido de los Canarios fue vergonzoso. García Covalles evaluó que el gol tempranero al minuto 9 –del moreliano José Alonso Flores y exjugador del Morelia– condicionó todo el planteamiento del equipo, “nos tardamos mucho en acomodarnos”. El estratega justificó que no hay rival fácil, ha costado en este torneo, pero sostuvo que está convencido de que se puede jugar de esta manera, se ha logrado, pero han sido inconsistentes. “Encontrar esa consistencia en este cierre va a ser fundamental, levanta el espíritu competitivo, lo teníamos…”, dijo. LE HEMOS FALLADO A LA AFICIÓN “Le hemos fallado a la afición”, sentenció Mario García, en referencia a la falta de público en el Estadio Morelos, que en consecuencia también afecta la infraestructura y mantenimiento material de la institución rojiamarilla, con malas canchas y menos gente. Consideró que se debe trabajar para dar mejor espectáculo, “a la gente no se lo hemos dado, ¿qué le podemos recriminar?”; sin embargo, defendió que ya se consiguieron más puntos que el otro torneo, pero insistió en que es el culpable. “Trabajé este partido horas, horas, como cualquier otro partido, ¿no salió? Me quedé cortito. Que la gente hable, hoy asumo la responsabilidad y listo, acá estoy, yo me equivoqué en el planteamiento”. Reiteró que la crisis que vive el Atlético Morelia no es de ahora, “no me pasó nada más a mí”, y se tiene que cambiar esa inercia. “Nosotros somos los primeros que tenemos que cambiar para que los demás cambien”. “Sí, es vergonzoso, pero hay tres partidos para tratar de cambiar esa cara. A mí me da vergüenza, yo sé lo que trabajamos, sé el esfuerzo de los muchachos, no está alcanzando, pero (también) vergonzoso es que fuera un tipo que engañara y no trabajara”.
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