La segunda oportunidad de Michael Sam en la NFL será con los Cowboys de Dallas. El entrenador Jason Garrett anunció el miércoles que el primer jugador abiertamente gay en la liga será añadido al equipo de prácticas de los Cowboys. Dallas, que precisaba reforzadores con jugadores defensivos con la función de asediar a los quarterbacks rivales a causa de lesiones y la salida del líder de sacks de la franquicia DeMarcus Ware, incorporó a Sam cuatro días después que éste fue dejado en libertad por los Rams de San Luis, cuando los equipos tuvieron que reducir sus nóminas a 53 jugadores. No es probable que Sam esté en la nómina principal del equipo para el domingo, cuando los Cowboys abrirán la campaña contra San Francisco. Garrett dijo que la decisión fue deportiva y esquivó las preguntas sobre el impacto de tener a Sam dentro del vestuario. "Ustedes deciden cuáles preguntas quieren hacer", dijo Garrett. "Nosotros estamos concentrados en fútbol americano. Es ahí donde está nuestra atención, y lo que la gente fuera de esta organización dice es asunto de ellos". Cualquier equipo puede contratar a Sam mientras esté en la nómina de prácticas de los Cowboys, pero tendría que colocarle en la nómina de 53 jugadores por al menos cuatro semanas. Los Cowboys no tomaron en cuenta a Sam en el último draft, y el dueño Jerry Jones dijo que su talla y habilidades le tenían señalado entre las posiciones de end defensivo y linebacker exterior. Dallas no lo seleccionó aunque lo tuvo disponible con tres de sus cinco selecciones en la séptima ronda, antes que los Rams lo seleccionaron 249no. Pero Dallas llega al inicio de la campaña con serias dudas en su línea defensiva tras permitir la mayor cantidad de yardas el año pasado en la NFL — y la tercera mayor cantidad en la historia de la liga. Sam, que fue el jugador defensivo del año en su división universitaria por Missouri la campaña pasada, con 11 derribos y medio, pero no pudo ganarse una plaza en una nómina de San Luis cargada de experimentados rushers del pase.
La Voz de Michoacán
