El mexicano Esteban Gutiérrez vuelve a "picar piedra" después de un 2014 complicado en que se fue sin puntos en Fórmula Uno y tuvo que dejar su asiento en Sauber, ahora tratará de buscar una nueva oportunidad en el circuito como piloto reserva de Ferrari. Después de ganarse el título de Novato del Año en 2013, al destacar en el Gran Premio de Japón de ese año, la recién concluida campaña fue un fracaso total para el equipo y otro más en el aspecto personal para el piloto regiomontano. La unidad de potencia montada de manufactura Ferrari demostró no estar a la altura, además del presupuesto limitado para realizar evaluaciones en el túnel de viento que impidieron al equipo tener un coche de media parrilla. Clasificar en el sitio 20 para el Gran Premio de Australia, fecha inaugural, dejo claro lo que se aspiraba para el coche, pero pudo mantenerse en pita en una frenética carrera que acabo con siete retiros y una descalificación para Daniel Ricciardo. Malasia parecía pintar mejor pero un retiro acabo con todo, tampoco acabó en Baréin al sufrir un aparatoso accidente del que salió ileso. En China y España cerró con el puesto 16 y tuvo un nuevo abandono en Mónaco. La actuaciones de Esteban eran complicadas, en Canadá pese a largar 22 pudo adelantar ocho posiciones para ser 14, pero luego volvían los altibajos en la siguiente carrera donde perdió dos lugares respecto a su salida con el decimonoveno lugar y en Silverstone abandonó tras un choque con Pastor Maldonado lo que le provocó una sanción de tres puestos en la siguiente competencia. En Alemania seguía sin dar puntos y Hungría volvía a dejar fuera a Gutiérrez antes de concluir la competencia, llegaba la mitad de la temporada y el equipo ya tiraba la toalla a diferencia de 2013 donde la segunda mitad tuvieron un repunte considerable.