Redacción / La Voz de Michoacán Si existe un apellido que causa terror y controversia en Italia, es el de Benito Mussolini, dictador italiano que estuvo al frente del país entre 1922 y 1943. En las últimas horas, Romano Floriani, bisnieto del Duce (apodo por el cual se dio a conocer el líder fascista a principios del siglo veinte), firmó su primer contrato con la Lazio y la noticia recorrió el mundo entero. El reciente vínculo oficial del juvenil con Las Águilas despertó la polémica por la conocida e histórica relación entre los fanáticos del club de la capital italiana y grupos fascistas del país, además de la extensa y oscura historia política de su bisabuelo. De hecho, aunque el vínculo de los tifosi con los símbolos fascistas se consolidó recién en la década del 70, el propio Mussolini era socio del club y concurría con habitualidad a ver los partidos. Cabe recordar que Mussolini fue un dictador que estuvo al frente de Italia durante la Segunda Guerra Mundial, donde fue aliado de Adolf Hitler y el nazismo. Entre sus ideales políticos estuvieron presentes la xenofobia, una clara idea de superioridad racial, la censura y fuertes medidas imperialistas. El futbolista, por su parte, se mostró contundente tras la firma: En la Lazio sólo me juzgan por mi forma de jugar, no por mi apellido”. Mientras que Mauro Bianchessi, entrenador de inferiores, agregó: Es un chico humilde que nunca se ha quejado, ni siquiera cuando no jugaba durante dos años. Nunca he hablado con sus padres y lo único que importa es si un jugador merece jugar. Nada más” Por último, fue Alessandra, madre del defensor, quien se pronunció frente a la agencia de prensa Adnkronos: “No tengo nada que comentar. Es algo de lo que prefiero quedarme al margen. Mi hijo no quiere que me entrometa en su vida privada ni en sus elecciones”.