Redacción / La Voz de Michoacán Adalid Maganda continúa con su lucha legal en contra de la FMF debido a su despido como árbitro de la Liga MX, ante esta situación el ex árbitro Roberto García Orozco levantó la voz y en entrevista para ESPN reveló que Arturo Brizio, junto con la comisión de arbitraje, sacaron con engaños a Maganda. “Yo conozco a Adalid porque conviví con él algunos años, no es una mala persona y al final él está dolido por la parte de cómo se le ha tratado, el tema de racismo lo dejo de lado porque esa no me consta pero lo que al árbitro le molesta es que no exista comunicación. “A Adalid lo llevaron con engaños para darlo de baja y eso es demasiado molesto, lo llevaron diciéndole que iban a revisar su partido y que iban a trabajar para que pudiera mejorar y de repente aparecen ahí los abogados para decirle que está dado de baja, es una situación que a cualquiera nos molestaría, en esta gestión esa es una situación que ha pasado demasiado, situaciones en las que nadie de la comisión da la cara y no se habla de frente y hoy en día existen demasiadas demandas en contra de la Federación porque finalmente no hay un trato humano por parte de la comisión hacia el árbitro”. García Orozco lamentó que ya no exista la asociación arbitral para defender a Maganda y reveló que en su momento César Ramos Palazuelos fue amenazado para que no se quedara al frente de la unión arbitral. “Hoy en día no existe esa unión, considero que el trabajo de licenciado Arturo Brizio al llegar a la comisión fue desaparecer la asociación, por diferentes circunstancias fuimos saliendo los líderes y ya no hubo quien tomará ese liderazgo por parte de los árbitros. “En su momento consideramos que el indicado para tomar ese lugar era César Ramos pero a César le dijeron que se olvidara de estar al frente de la asociación porque si lo hacía iba a tener repercusiones. Yo entendí perfectamente a César, él prefirió enfocarse en su carrera e ir al Mundial y seguir bien en México, pero lo primero que hizo el licenciado Brizio llegando fue desintegrar la asociación, se dividió el grupo y ahora están pagando las consecuencias porque el grupo que fue beneficiado hoy en día por su capacidad no ha demostrado trascender dentro del arbitraje”. El exárbitro espera que el caso de Maganda ayude a cambiar los malos tratos que reciben varios silbantes por parte de los elementos de la comisión de arbitraje. Yo creo que nadie merece un trato de estos, en cualquier empresa yo creo que siempre el trato humano es importante, aquí desafortunadamente siempre ha existido un doble discurso, siempre se han manejado mal las cosas por parte de la comisión y al final lo que le duele al árbitro es eso, a los árbitros les gustaría que el presidente diera la cara y hablara directamente con las personas involucradas y que les diera sus puntos de vista”. “Yo creo que el árbitro estaría más tranquilo y se iría del arbitraje contento por la forma en que lo tratan, sobre todo al final de las carreras, y algo que enfatizó mucho es el doble discurso, te dicen una cosa y sucede otra muy diferente”, finalizó García Orozco en entrevista para el medio deportivo.