Redacción / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Mientras algunos ya abren "clandestinamente" y a días de que se haga oficial la reapertura de gimnasios en la capital michoacana, tras el confinamiento por el COVID-19, estos centros deportivos ya se preparan para que sus empleados y clientes estén seguros en la “nueva normalidad”. Algunas de las medidas de higiene y limpieza contemplan agendar un horario para evitar aglomeraciones y la operación del 25% de sus equipos de cardio. Video: Víctor Ramírez. Asimismo se dio a conocer que se solicitará a los usuarios desinfectar sus manos con alcohol en gel antes de ingresar y al salir de la unidad, también deberán evitar saludar de mano o besos y deberán limpiar sus tenis sobre el tapete sanitizante. A continuación te damos a conocer el protocolo y recomendaciones que están dando a conocer estos sitios en sus redes sociales, y los cuales tendrán que ser respetados y no se tolerará faltas. Foto: Víctor Ramírez. También dieron a conocer que quienes se nieguen a llevar a cabos estas disposiciones será retirado inmediatamente del centro deportivo, inclusive pudiendo ser baja por tiempo definido. Iron Gym Morelia Gimnasio Apolo Morelia Nos estamos preparando para la nueva normalidad: tapete sanitario, gel desinfectante, toma de temperatura corporal, y un sistema de citas que garanticen tu atención personal y la sana distancia. True Gym Morelia Smart Fit México Empleados medirán la temperatura en recepción con un termómetro digital a distancia. Si esta es superior a 37.5 grados, se le pedirá al usuario regresar a casa, https://www.youtube.com/watch?time_continue=1&v=7o86a2rchH4&feature=emb_logo Seven Days Gold - Sucursal Altozano Es importante recordar que el sector de los propietarios de gimnasios es uno de los que ha presentado mayor insistencia para que se les permita regresar a sus actividades. Después de que en Morelia se permitió la apertura parcial de salas de cine desde inicios de junio, las autoridades municipales señalaron que este contraste se debía a que las cadenas de exhibición de películas contaban con un importante protocolo sanitario que resultaba difícil de replicar en los gimnasios.