Holanda, la selección que humilló a España rumbo a la conquista del tercer lugar del pasado Mundial, sucumbió el martes 3-2 ante República Checa y no disputará la Eurocopa del próximo año. Los holandeses empezaron el partido por la última fecha de las eliminatorias a dos puntos de Turquía en el Grupo A, pero además con desventaja en los resultados frente a frente. Eso significaba que Turquía sólo tenía que evitar una derrota ante Islandia para terminar tercera y jugar por lo menos el repechaje. Turquía se impuso 1-0 a Islandia y se clasificó automáticamente a la Euro del año próximo en Francia, como el mejor tercer puesto. El resultado poco importó para Holanda, que de todos modos cayó ante un equipo checo que terminó con 10 jugadores. Holanda se perderá la Euro por primera vez desde 1984. "Ahora hay que mirar al futuro", dijo el técnico Danny Blind. "Esto es muy decepcionante para los jugadores, para mí y para Holanda, pero hay que mirar al frente. La nueva meta es clasificarnos para (la Copa del Mundo en) Rusia". Los checos tuvieron el control del esférico y se colocaron arriba a los 24 minutos, con un tanto de Pavel Kadebarek. Josef Sural amplió la cuenta a los 35, pero Marek Suchy recibió la tarjeta roja poco antes del intermedio, por una falta sobre Memphis Depay. Ni siquiera la superioridad numérica ayudó a los holandeses, que quedaron abajo por 3-0 a los 66, con un autogol de Robin van Persie. Muchos espectadores decidieron entonces poner fin a los abucheos y prefirieron marcharse del Amsterdam Arena. Quienes se quedaron pudieron ver los tantos de Klaas-Jan Huntelaar a los 70 minutos y de Van Persie a los 83. Pero la derrota y la eliminación fueron inevitables. Croacia, en tanto, acudirá al torneo continental por cuarta edición seguida tras vencer de visitante 1-0 a Malta, asegurándose el segundo puesto del Grupo H, en el que Italia quedó como líder al remontar en su victoria 2-1 ante Noruega.