La Máquina sumó su sexto cetro de la Concacaf 2014

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Agencias/La Voz de Michoacán.
Toluca.- Finalmente, el Cruz Azul se sacudió el fantasma de la derrota en finales, al conseguir su sexto título en la Liga de Campeones de la Concacaf 2014, tras empatar 1-1 con Toluca, gracias al criterio de gol de visitante, luego del 0-0 de la “ida”, para ganar su boleto al Mundial de Clubes Marruecos 2014.

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Con una salvada milagrosa de José de Jesús Corona, luego de una desviada de Luis Amaranto Perea y posterior falla a bocajarro de Pablo Velázquez, vino el silbatazo final y el festejo celeste en el mismo Nemesio Díez.

La Máquina Celeste dejó atrás las dos derrotas previas en finales en la Concachampions, ante Atlante y Pachuca, y además de lograr su boleto para la justa de Marruecos, en diciembre próximo, se convirtió en el equipo más ganador de la Concacaf, con 6 campeonatos, por encima de los 5 del América, tras coronarse en las ediciones del 69, 70, 71, 96, 97 y ahora, 2014.

Los Celestes conquistaron su primer título de relevancia desde que se coronaron  en la Liga Mexicana, en el Invierno de 1997, tras vencer al León. Desde entonces, había perdido ocho finales: 5 de liga, 2 de la Concacaf y una de la Libertadores, lo que le valió el mote del “subcampeonísimo”.

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Un disparo de Wilson Tiago obligó al lance de José de Jesús Corona; los escarlatas intentaron varias veces esta opción para aprovechar lo rápido de la cancha, propiciado por la lluvia.

La Máquina guardó el esférico para calmar los ímpetus escarlatas, además de buscar avances por las bandas y algunas paredes por el centro. Joao Rojas, tras una diagonal hacia el centro, sacó un zurdazo raso a contrapié, que el arquero Alfredo Talavera atajó.

El choque se tornó muy cerrado y flojo porque ambos conjuntos fallaban en elaborar ataques a causa de rápidas pérdidas del balón por ambos bandos.

Miguel Ponce sacó un zurdazo cruzado que salió a un metro, mientras Talavera atajó un intento de Marco Fabián.

Congelan el Infierno

Un yerro en la salida escarlata por la derecha permitió a Marco Fabián escapar a fondo y mandar el esférico a un solitario Hugo Mariano Pavone, quien a segundo poste empalmó con pie derecho en el aire para dejar sin chance a Talavera, para el 1-0 visitante a los 40 minutos.