Agencias / La Voz de MichoacánA sus 31 años, Jorge Soler se preguntaba cuándo iba a tener su primer jonrón para dejar a un rival en el terreno. La respuesta llegó el martes en la noche luego de que un enorme batazo suyo estremeciera el corazón de los Nacionales y levantara los ánimos de un equipo en horas bajas. Horas antes de que Soler pegara su cuadrangular con dos hombres a bordo para que los Marlins vinieran de abajo y vencieran 5-4 a Washington delante de 8,811 aficionados en el loanDepot park, el equipo había recibido una noticia preocupante. El club supo que no podrá contar con Jazz Chisholm Jr. durante las próximas cuatro a seis semanas, lo que implica la pérdida de un jugador clave en sus planes y, sobre todo a la ofensiva, de ahí que la acción de Soler cobrase mayor relevancia.- PUBLICIDAD - “Sin duda, un batazo así era importante para el equipo’’, expresó el slugger cubano. “Habíamos perdido a Jazz, también perdimos a Jesús Sánchez. Los que quedamos aquí debemos responder. Me siento bien ahora porque se logró el efecto deseado’’. El jardinero de los Marlins Jazz Chisholm Jr. reacciona tras lesionarse en una jugada en el octavo inning del partido ante los Rojos de Cincinnati, celebrado el 13 de mayo de 2023 en Miami. El pelotero de las Bahamas y jardinero central fue colocado en la lista de lesionados de 10 días (retroactivo al domingo) con problemas en un dedo del pie derecho, pero es probable que puede estar algo más que eso, para no hablar ya que refuerza una tendencia de problemas de salud. “No es lo que quieres de tu jardinero central estrella. Pusimos mucho en su plato a principios de año, en los entrenamientos de primavera y no ha hecho más que crecer en esa posición. También comenzó a batear últimamente’’, comentó el manager Skip Schumaker. “Definitivamente es una pérdida dura, pero por lo que entendemos estará fuera entre cuatro a seis semanas. Esperemos que vuelva sano’’. Los jugadores de los Marlins celebran luego de que Jorge Soler (izq.) disparara un jonrón en el noveno inning que dejó al campo a los Nacionales de Washington, en el partido celebrado el 16 de mayo de 2023 en Miami. Chisholm se lesionó el dedo gordo del pie derecho en el bloque de cemento de la pared del jardín central el sábado cuando trataba de hacer una captura de un largo batazo, pero en ese momento los rayos X dieron negativos y el club inicialmente informó sobre una contusión en el pie derecho. Se pensaba que Chisholm estaría disponible el domingo, pero el pelotero -que estuvo limitado a 60 juegos en el 2022 debido a una distensión lumbar derecha- vio al especialista Robert Anderson el lunes en Carolina del Norte para obtener más información. En enero, Chisholm, de 25 años, se ofreció como voluntario para pasar al jardín central desde la segunda base, si eso significaba que Miami podría añadir un bate importante en alineación, que llegaría con el campeón de bateo de la Liga Americana, Luis Arráez, en un canje con los Mellizos. El abridor de los Marlins Jesús Luzardo lanza en el primer inning del partido ante los Nacionales de Washington, celebrado el 16 de mayo de 2023 en Miami. Al menos, después de la mala noticia de Chisholm, los peces contaron con una sólida faena de Jesús Luzardo en el montículo, quien a lo largo de seis entradas permitió una carrera -un cuadrangular de Lane Thomas en la sexta- y seis imparables con siete ponches y una base por bolas. Cuando se marchó al dugout, Luzardo dejó el juego favorable a Miami 2-1, pues los de casa pisaron la goma dos veces en la segunda entrada gracias a un par de errores de los Nacionales, porque la ofensiva no se hizo sentir de manera consistente. Washington, sin embargo, logró empatar ante los envíos de Huascar Brazobán en el octavo con un sencillo remolcador de Jeimer Candelario y luego tomaron el comando con un imparable de dos carreras de Dominic Smith, que sentenció el encuentro. Arráez, que pegó doble y sencillo en la jornada, trajo para el plato la tercera de los peces en el noveno antes de que Soler viniera a la caja de bateo y en conteo de tres y dos, con dos outs para aumentar el dramatismo del momento, sacara la bola del parque. “Me había sentido mal porque había fallado en ocasiones previas, había dejado a hombres en base’’, agregó Soler. “En tres y dos estaba esperando la recta. Solo la recta. Desde que la conecté supe que la bola se iba del parque. Fue un sentimiento muy agradable’’