El Tottenham Hotspur, gracias a dos tantos de Harry Kane, uno de Toby Alderweireld y otro de Kyle Walker, goleó a sus vecinos del West Ham (4-1) y se situó a solo dos puntos de los puestos de Liga de Campeones. En uno de los muchos derbis de Londres que hay a lo largo de la temporada en la Premier League, los del norte de la capital británica ganaron cómodamente a sus colegas del este en un partido que Kane encarriló muy temprano. Después del sentido minuto de silencio y de que White Hart Lane entonará La Marsellesa, el himno nacional francés, en memoria de las víctimas del atentado de París, comenzó el duelo entre dos de las sorpresas esta temporada en la Inglaterra. Los 'spurs', que han ido de menos a más este curso, se medían contra el 'matagigantes' de la competición, unos 'hammers' que a domicilio ya habían derrotado a Arsenal (0-2), Liverpool (0-3) y Manchester City (1-2). La ausencia del argentino Erik Lamela supuso la primera titularidad en los últimos dos meses del surcoreano Son Heung-min, que formó como media punta junto al belga Moussa Dembélé y al danés Christian Eriksen. En el West Ham, Slaven Bilic apostó por el ya recuperado Andy Carroll en la punta del ataque, con Victor Moses, Manuel Lanzini, Diafra Sakho, Mark Noble y Cheikhou Kouyaté en el centro del campo. A los 23 minutos adelantó Harry Kane a los de casa después de recibir un pase de Dele Alli, girarse dentro del área y fusilar a un Adrián San Miguel ya vencido. Pudo llegar el empate de los 'hammers' apenas dos minutos después, pero el disparo de Kouyaté lo rechazó el larguero. Perdonó el West Ham y mató el Tottenham a la media hora con un gran testarazo del internacional belga Toby Alderweireld tras un saque de esquina botado por Eriksen.