Maricruz Rios/ La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. En sólo un año, el porcentaje de población con acceso a Internet creció de manera importante. Mientras que en 2017 el 59 por ciento de la población tenía acceso a Internet, el año pasado el 69 por ciento de las personas con 6 años o más ya tenían medio de acceder a la gran red digital, ya fuera mediante bancha anda o regular, con conexión fija desde su hogar o mediante un paquete de datos vía celular. De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH), realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en conjunto con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), Michoacán ha sido de los estados que más avanzó en materia de conectividad durante el último año. No sólo aumentó su número de usuarios de Internet y hogares con este servicio, sino que en el ranking nacional de conectividad pasó del lugar 29, que ocupaba en 2017, hasta el 23, con el que terminó el año pasado, creciendo de manera importante sobre todo el número de personas con acceso a World Wide Web desde zonas rurales, debido en gran medida a la colocación de un mayor número de equipos tipo teléfonos móviles inteligentes (smartphones) en áreas localizadas fuera de puntos urbanos, así como con mejoras mismas dentro de la infraestructura de red y conexión. En cifras desglosadas, la ENDUTIH 2018 refleja que mientras el 69 por ciento de la población general en la entidad tiene acceso a Internet, el uso de las Tecnologías de la Información sigue siendo un fenómeno predominantemente urbano, ya que el promedio de usuarios varía mucho entre habitantes de ciudad y habitantes de comunidades rurales. En este sentido, el 79 por ciento de los habitantes de puntos urbanos cuenta con alguna conexión a Internet; el año pasado este porcentaje era de 70. En cuanto a las poblaciones en puntos rurales, sólo la mitad de los habitantes tiene acceso real a Internet, que sin embargo retrata un crecimiento importante, pues en 2017 la ENDUTIH reflejó que únicamente el 35 por ciento de esta población tenía conectividad en línea. Las deficiencias Pero además de la falta de infraestructura y equipos de conexión, existen otros factores que se convierten en un problema para la navegación en Internet en aquellos usuarios que sí cuentan con una conexión. La más importante es la lentitud del servicio, pues a pesar de que supuestamente el 99 por ciento de los hogares y puntos de acceso a Internet cuentan con banda ancha, el 51.9 por ciento de los usuarios manifestó tener serios problemas con la velocidad de transferencia de datos, o sea, una Internet muy lenta. Además, el 39.3 de los usuarios se quejaron de constantes interrupciones en el servicio, el 25.6 por ciento que la red está llena de información no deseada que aparece arbitrariamente y el 16.7 dijo tener miedo a las infecciones por virus informáticos. A recordar que Gabriel Ochoa Hernández, coordinador General de Centro Estatal de Tecnologías de Información y Comunicaciones (Cetic), consideró que ayuntamientos debían apostarle una mayor gestión de recurso a nivel federal para mejorar la conectividad. Para las conexiones satelitales, la geografía de Michoacán no ayuda debido a que si bien es “muy bella”, también es muy “escabrosa” debido a que se necesitan un determinado ángulo para conectar con el Satélite y a partir de que hay cumbres muy elevadas no se puede hacer un uso generalizado, sobre todo en comunidades rurales. La realidad es que buena parte de Michoacán no tiene acceso a Internet ante una carencia de infraestructura, que es bastantes cara por la cuestión de la población, que está muy dispersa en núcleos de comunidades y donde a veces no se justifican una inversión” para ampliar la red y conectar a una cuantas personas, explicó. Gabriel Ochoa resalta que, si bien desde hace algunos años todos los sistemas y equipamiento necesario para hacer estas interconexiones han venido a la baja en precios, “la dificultad es que no hay un presupuesto robusto para que el Gobierno del Estado y hasta los propios municipios, puedan poner su propia infraestructura”.
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