Evelin Galindo / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Las condiciones del estado de Michoacán no permitirán gran crecimiento económico durante 2018, por lo que la expectativa es que el Producto Interno Bruto del estado sólo avance 1.5 por ciento, es decir, muy similar al avance del año anterior, aunque para el caso del bolsillo familiar el panorama será más negativo debido a las alzas de los productos básicos, servicios y los energéticos. El coordinador de Proyectos del Colegio de Economistas del Estado de Michoacán, Heliodoro Gil Corona dijo que hay aspectos que han frenado desde el año pasado el crecimiento en la entidad, como la disminución de la actividad rural, ya que en el campo la tendencia de producción y empleos fue a la baja, en relación con el año 2016, año en que la economía creció un 3.7 por ciento. Señaló que el último dato del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) del segundo trimestre de 2017, el campo registró una caída de 9.3 por ciento, y los indicadores demuestran que los meses venideros serán muy similares al 2017 en la cuestión agropecuaria. Otro factor es que, durante todos los meses del año pasado, la actividad industrial fue negativa y el descenso podría continuar por la falta de inversión pública, que no sólo afecta a la industria, sino al sector constructor. “La reducida inversión pública, junto con la caída del campo y el decrecimiento de la industria, el saldo no es nada alentador y por lo tanto, el panorama para el año nuevo, tampoco lo es, por lo que el PIB de Michoacán estaría creciendo apenas 1.5%”, pronosticó. Con los mismos factores que se están proyectando, los economistas visualizan un débil crecimiento para el campo, una conducta poco favorable en el desempeño industrial y recursos de inversión productiva limitados (arriba de los 1,200 millones de pesos). Estos fenómenos de des- aceleración, se han estado presentes en México desde el año 2007, sin embargo, sus efectos son mayores año con año. Para más información consulte la edición impresa del 22 de enero