AP / La Voz de Michoacán Detroit. Los trabajadores de la planta de General con más empleados aprobaron el viernes un nuevo contrato con la compañía, aunque este no garantiza que se ponga fin a una huelga que ya lleva 40 días. Con 78% de votos a favor, los obreros de la ensambladora de camionetas SUV en Arlington, Texas, aprobaron el contrato, mientras que los empleados especializados votaron 60% a favor. La planta de Arlington es la sección del sindicato de United Auto Workers que más gente de GM representa, con más de 5.000 sindicalizados. Los porcentajes de la votación se publicaron el viernes en el sitio web de la fábrica, pero no se dieron los totales. Además, los empleados en la planta de ensamblaje en Wentzville, Missouri, cerca de San Luis, aprobaron el acuerdo el viernes con 63,5% de obreros y 69,9% de empleados especializados. Aproximadamente 49.000 trabajadores se fueron a huelga el 16 de septiembre, paralizando la producción en más de 30 plantas en Estados Unidos y obstaculizándola en México y Canadá debido a la escasez de partes. Los analistas calculan que el costo de la huelga para GM será de más de 2.000 millones de dólares. Al parecer, los líderes de la oficina del sindicato en Arlington consideran que el contrato será aprobado cuando se anuncie el total de los votos la tarde del viernes. El nuevo contrato a cuatro años incluye una combinación de aumento de salarios y pagos únicos anuales, así como una prima de 11.000 dólares. Pero también permite que GM cierre tres fábricas en Estados Unidos que fabrican transmisiones y autos que se venden poco.