Maricruz Rios / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Las nuevas tendencias, los patrones de consumo, la influencia de las redes sociales y el activismo, entre otros factores, han favorecido la integración de un aparente nuevomodelo familiar, en donde uno de los vértices es la tenencia de una mascota. Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 70% de los hogares mexicanos cuenta con una mascota, principalmente perros y gatos, lo que ya ha generado un impacto financiero desde diversos ángulos, por el gasto dedicado a estos animales que han detonado ciertas actividades económicas. No sólo se trata de un fenómeno social que recae en la adopción o compra de una animal de compañía, sino en la práctica de un trato más digno para ellos, en algunos casos incluso cayendo en el apartado de “perrhijo” o “gathijo”, términos coloquiales ampliamente usados con los que se designa a aquellas mascotas que ocupan un lugar preponderante en el “organigrama” de un hogar; aquí los gastos dejaron de ser sólo comida y chequeos médicos pues muchos actualmente invierten cantidades mayores para consentirlos en menor o mayor medida. Adrián Alcántara, médico veterinario zootecnista por la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, con especialidad en especies pequeñas ymaestría en Dermatología Oncólogica por parte de la Universidad Nacional Autónoma deMéxico (UNAM), advierte que la situación de dar un trato más digno y cariñoso a las mascotas, ha tenido un auténtico ‘boom’ en los últimos años, por lo que el cuidado adecuado puede implicar un gasto al año de 10 mil pesos solo de rubros de comida y atención médica. En el caso del propio Adrián Alcántara, en su hogar coexisten un gato grande y dos perros mestizos de raza pequeña, y en cada uno invierte unos 500 pesos mensuales sólo en lo que él mismo considera básico, “pero hay gente que gasta mucho más en ropa, accesorios, juguetes, estética y otras lujos”. Según el cirujano de perros y gatos, las redes sociales y el activismo han tenido mucho que ver en esta “nueva cultura” de respeto animal, que no sólo se ve reflejada en rescatar animales en situación de calle o manifestarse contra las corridas de toro, sino en la concientización de que el trato digno hacia los animales comienza desde el hogar. Gracias a esto, los patrones de consumo del michoacano, y del mexicano en general, han cambiado, y en su inversión mensual se encuentra ya un apartado de “dieta” para el perro o el gato, “aunque en algunos otros casos tienen hámsteres o conejos”. Bajo este orden de ideas, Adrián Alcántara comenta que este fenómeno ha beneficiado directamente a los veterinarios, especialmente los que laboran en hospitales en forma “pues cada vez son más las personas que buscan un lugar con especialistas”, además de la industria de alimentos para mascotas. “Estamos hablando de casi 50 millones de mascotas”, expone. ¿Quieres saber más de este tema? Las páginas de tu periódico La Voz de Michoacán también te informarán.