En un negocio dedicado a la venta de frutas y verduras, garantizar la frescura de los productos es uno de los factores de mayor peso para la calidad que perciben los clientes. Además, permite reducir desperdicios y maximizar las ganancias. La frescura es tan importante en estos negocios, que ello determina si las personas regresan o no a un punto de venta. Y aunque lograrlo parece un desafío, existen algunas medidas que es posible implementar, como el uso de exhibidores de frutas y verdura, diseñados específicamente para ese objetivo. Aquí te compartimos 9 tips prácticos para que tus frutas y verduras se mantengan en excelente estado por más tiempo: 1. Implementa un sistema de rotación de inventario Uno de los errores más comunes en la gestión de frutas y verduras es no seguir un sistema de rotación adecuado. Lo más sencillo es aplicar el principio de "Primero en entrar, Primero en Salir" (FIFO, por sus siglas en inglés). Esto significa que las frutas y verduras más antiguas deben ser las primeras en venderse, mientras que las nuevas adquisiciones deben colocarse en la parte trasera de las estanterías o contenedores. Al seguir esta práctica, evitarás que los productos se queden demasiado tiempo en exhibición y, en consecuencia, podrás reducir las pérdidas por deterioro. 2. Separar las frutas que emiten etileno El etileno es un gas natural que emiten algunas frutas a medida que maduran. Un ejemplo son las manzanas, plátanos, peras y melones que liberan cantidades considerables de este gas, lo que puede acelerar el proceso de maduración de otras frutas y verduras si se almacenan juntas. Para evitar que tus productos se deterioren más rápido de lo necesario, lo más recomendable es separar aquellas frutas que emiten etileno de las verduras más sensibles, como las lechugas, espinacas y calabazas. Este simple hábito prolonga la frescura y reduce el desperdicio considerablemente. 3. Usa sistemas de exhibición con contenedores adecuados La forma en que exhibes tus frutas y verduras también influye en su conservación. Por ejemplo, el uso de contenedores plásticos reutilizables (CPR) que están ranurados es una excelente opción, ya que permiten una mejor ventilación de las verduras. Este tipo de recipientes están fabricados con materiales de grado alimenticio y, al ser de plástico, no absorben la humedad y se pueden lavar para retirar la acumulación de residuos que pueden afectar la frescura de los productos. Además, las empresas especializadas ofrecen sistemas diseñados para acomodar ese tipo de cajas en forma vertical u horizontal, como por ejemplo los exhibidores comerciales de JM Villegas, que están fabricados especialmente para ofrecer el mejor acceso a los productos. Foto: Especial 4. Evita el exceso de luz y calor directo Aunque las frutas y verduras tienen que ser visibles, debes evitar la exposición directa al sol o a luces demasiado intensas, ya que esto puede acelerar su maduración. Lo ideal es que los productos estén en un ambiente fresco y con una iluminación moderada que no aumente la temperatura. Para evitarlo, asegúrate de que las vitrinas y los sistemas de exhibición estén ubicados en lugares estratégicos, pero lejos de las fuentes de calor. 5. Mantén una temperatura de refrigeración adecuada Cada tipo de fruta y verdura tiene requerimientos de temperatura puntuales. Por ejemplo, productos como zanahorias, coliflor y brócoli se conservan mejor entre 0 °C y 4 °C, mientras que los cítricos y tomates prefieren temperaturas más cálidas, en torno a los 10 °C. En lugares con climas cálidos, lo mejor es el uso de refrigeradores, que cuenten con un termostato confiable que permita ajustar la temperatura según las necesidades de cada producto. Esto con el fin de mantener la cadena de frío. 6. Agrupa los productos según su sensibilidad No todas las frutas y verduras tienen la misma sensibilidad al manejo o las mismas necesidades de conservación. Por eso, es recomendable agrupar los productos de acuerdo con su durabilidad. Por ejemplo, las verduras de hoja verde, que son más delicadas, deben estar separadas de las papas o las cebollas, que son más resistentes. Clasificarlas por tipo, te servirá para prolongar la frescura de los productos, pero al mismo tiempo te ayudará a brindar un mejor servicio al cliente, ya que estarán organizados de forma coherente y accesible. Foto: Especial 7. Humedece las verduras de hoja verde regularmente Las verduras de hoja verde, como la lechuga, la espinaca y la acelga, tienden a perder su frescura rápidamente si no se mantienen en condiciones adecuadas de humedad. Una forma efectiva de alargar su vida útil es rociarlas ligeramente con agua fresca varias veces al día. Sin embargo, es importante no exagerar en la cantidad de agua, ya que el exceso de humedad puede causar que se pudran. Además, asegúrate de que estas verduras estén en un área con buena ventilación para evitar la acumulación de humedad. 8. Inversión en equipos de conservación de alta calidad Para cualquier negocio que maneje grandes volúmenes de frutas y verduras, invertir en equipos de conservación adecuados no es un lujo, sino una necesidad. Este es el caso de los sistemas de exhibición con ventilación adecuada y acceso sencillo para los clientes. Se trata de inversiones que mejoran la calidad de los productos, pero que también harán más eficiente la gestión del inventario y reducirán el desperdicio. A largo plazo, estas mejoras se traducen en ahorros significativos y en una mayor satisfacción del cliente. 9. Limpieza constante del área de exhibición y almacenamiento Al considerar la exhibición, también es importante elegir contenedores con ruedas, como un sistema que permitirá moverlos con facilidad durante las labores de limpieza. Así, podrás garantizar que el área de almacenamiento y exhibición esté siempre limpia y sin restos de productos que puedan atraer insectos o generar malos olores. La acumulación de residuos, líquidos o suciedad puede atraer plagas que deterioran la calidad de los productos y causan pérdidas. Por el contrario, un espacio limpio influye en la imagen y percepción de tu negocio, como una estrategia para fidelizar a tus clientes, Conclusión Mejorar la exhibición de frutas y verduras en tu negocio es completamente posible si aplicas las estrategias adecuadas. Desde el uso de contenedores plásticos reutilizables con ventilación, hasta la correcta separación de los productos que emiten etileno, cada detalle cuenta para prolongar la frescura y calidad de los alimentos. La inversión en sistemas de exhibición bien diseñados y la implementación de un sistema de rotación eficiente, mejorará la presentación de tus productos y optimizará el rendimiento de tu negocio. Recuerda que ofrecer frutas y verduras frescas y bien organizadas crea una mejor experiencia de compra para tus clientes y reduce el desperdicio.