Redacción / La Voz de Michoacán La caída de los precios de crudo podría contribuir a la reducción de la inflación de India y el costo de sus facturas de importación, lo que podría también ayudar a reducir el déficit comercial del país, evalúan los economistas. "La economía india es uno de los principales ganadores de los precios mundiales más bajos del petróleo", aseguró a la cadena CNBC Rajiv Biswas, economista jefe de Asia Pacífico de IHS Markit. El experto señaló que más del 80% del consumo total de energía de la India en el año fiscal 2018-2019 fue importado. "Un periodo prolongado de precios bajos del petróleo respaldará el poder adquisitivo discrecional", dijo, por su parte, Radhika Rao, economista del Grupo DBS de Singapur, y agregó que los precios internos del petróleo podrían potencialmente volverse más baratos. El poder adquisitivo discrecional se refiere a la cantidad de efectivo que una persona tiene disponible para gastar después de descontar sus impuestos y otros gastos. "Tenemos la esperanza de que un aumento en el gasto público, una posición positiva de las exportaciones netas y los efectos básicos podrían impulsar el crecimiento [fiscal 2021]", estimó Rao. En febrero, el ministro indio de Petróleo, Dharmendra Pradhan, afirmó que estaría contento si los precios del crudo estuvieran a entre 50 y 60 dólares por barril. Los precios del crudo Brent cayeron a mínimos de varios años después de que la OPEP+ no lograra la semana pasada llegar a un acuerdo sobre recortes adicionales de producción. En respuesta al fracaso del pacto, Arabia Saudita realizó el recorte de precios oficiales más drástico en al menos 20 años y comunicó a los compradores que aumentará su producción de crudo en hasta 2 millones de barriles por día. La medida de Riad provocó una dramática caída de los precios del petróleo, lo que llevó también al desplome de los mercados financieros en todo el mundo. Los países miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) han perdido más de 500 millones de dólares en un día tras la dramática caída de los precios del petróleo causada por la respuesta de Arabia Saudita al fracaso del pacto de los países OPEP+.