En México, se invierte más en construcción ferroviaria que en refinación y electricidad, según INEGI

En la actualidad, el sector de la refinación y el de la electricidad han quedado exhibidos ante la falta de inversiones, no solo desde este gobierno, sino de décadas atrás

Agencias / La Voz de Michoacán

El valor de la construcción de obras de infraestructura ferroviaria ya superó las observadas en los sectores de refinación así como al de generación y distribución eléctrica juntas, de acuerdo con cifras de la Encuesta Nacional de Empresas Constructoras.

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Este reporte del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), apunta que al cierre de marzo de 2024, el valor de la producción de las empresas de la construcción, en obras ferroviarias alcanzó los 6 mil 822 millones de pesos, un incremento de 18 veces, reportado con el mismo mes de 2018.

En tanto, para el caso de infraestructura para la generación y distribución eléctrica, así como en refinerías, las inversiones se ubican en 6 mil 753 millones de pesos, un incremento en comparación con marzo de 2018 de solamente 67%.

“Creemos que el sector petrolífero mexicano debe, a diferencia de las constantes fluctuaciones hasta ahora, realizar una inversión continuada en el tiempo en términos de infraestructura y prospección de nuevos yacimientos como único camino a poder incrementar su producción de crudo y conseguir una mayor independencia de otros mercados como el de Estados Unidos”, expuso la empresa belga Sarens, que participa en la construcción en diferentes obras públicas.

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Asimismo, señaló que el crecimiento de la industria recae en una política estable y con unos objetivos claros en torno al sector del petróleo y gas, contando siempre con la ayuda de empresas punteras como Sarens para llevar a cabo la renovación de antiguas instalaciones con el objetivo de aumentar la producción, mejorar la infraestructura disponible para el transporte de estos recursos y construir nuevas plantas.

Para la compañía, uno de los elementos cruciales que hace que aumente la inversión en infraestructura energética en nuestro país es el nearshoring, la relocalización de empresas.

La empresa ha participado en proyectos de gran calado para la administración actual, como es el caso de las obras ferroviarias más emblemáticas, como la última fase del Tren Interurbano México-Toluca o la ampliación del Tren Suburbano al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), además de otros proyectos como la construcción de la nueva refinería de Dos Bocas o la construcción de 36 km de sección de vía en el estado de México.

En la actualidad, el sector de la refinación y el de la electricidad han quedado exhibidos ante la falta de inversiones, no solo desde este gobierno, sino de décadas atrás.

El área de refinación, las cifras de propio Pemex apuntan a que desde 2001 la empresa ha reportado pérdidas financieras.

Respecto al sector eléctrico, con las altas temperaturas recientes, se ha evidenciado la falta de inversiones públicas y privadas en generación, transmisión y distribución de energía.

Lo anterior obedece a que este gobierno no ha elevado las inversiones en los dos sectores, por la política de fortalecer a las empresas públicas, Pemex y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

Para expertos, el gobierno debe abrirse a la colaboración con las empresas para poder hacer sinergias en aras de enfrentar los retos que se aproximan por el cambio climático, el incremento de demanda industrial y los esfuerzos de transición energética a fuentes renovables.

“Sarens colabora con los principales sectores industriales que suponen una parte importante de la economía mexicana. Desde la construcción civil, hasta el sector del petróleo y el gas, pasando también por las energías renovables, dispone del equipo necesario para hacer frente a cualquier proyecto, sea de la escala que sea, y de la forma más eficiente posible”, añadió.

En lo que respecta a sector ferroviario, este gobierno ha elevado las inversiones impulsado los proyectos del Tren al AIFA, el del Corredor Interoceánico, el México-Toluca, ahora nombrado El Insurgente, y especialmente el Tren Maya, donde el ejército también participa en un esfuerzo de retomar los trenes de pasajeros.