Maricruz Rios / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. El reciente Índice Competitividad 2024 del IMCO exhibe las grandes brechas que persisten entre las entidades, tanto en infraestructura como en temas que son competencia de los gobiernos, como la educación y las estrategias de combate a la inseguridad. El informe realizado por el Instituto Mexicano de la Competitividad, y que coloca a Michoacán en el lugar 29 de 32 entidades a nivel nacional, llama a replantear estrategias locales y regionales de gobierno y desarrollo para acotar las grandes diferencias estructurales, particularmente para los 16 estados peor evaluados, reflexiona Helidoro Gil Corona, coordinador de Proyectos Estratégicos del Colegio de Economistas del Estado de Michoacán (CEEM) “Los estados del país son un mosaico de realidades económicas y sociales divergentes con distintas condiciones internas para el desarrollo local”, expuso el también profesor-investigador de la Facultad de Economía de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH). Abundó Gil Corona que la evidencia presentada en el índice de Competitividad 2024 y otros estudios similares nos indica que “hay muchos ‘méxicos’ de acuerdo con la disponibilidad y calidad de los recursos humanos, materiales y financieros de las entidades, así como de distintos factores condicionantes ligados a la inseguridad pública, educación, mercado de trabajo y a los climas locales enrarecidos poco propicios para atraer inversiones productivas”. El académico nicolaita recordó que mediante índice lo que se pretende es calificar a las entidades federativas conforme a su capacidad, preparación para generar, atraer y retener tanto nuevas inversiones como talento humano. Conforme al reporte presentado el pasado 16 de mayo, Ciudad de México es la entidad más competitiva, le siguen Baja California Sur y Coahuila, en tanto que Oaxaca se ubica en la parte más baja del listado como la menos competitiva. Explicó Gil Corona que “la métrica del índice del IMCO está compuesta por 50 indicadores, 6 subíndices y a los 32 estados con las correspondientes dimensiones coyunturales y estructurales, teniendo como referencia estimaciones de 2024 y 2023”. En el caso de Michoacán, la evaluación la ubicó entre los cuatro estados menos competitivos, desplomándose seis lugares con respecto a la medición de 2023, aprobando únicamente uno de los 50 indicadores y con varias llamadas de atención en temas como inseguridad, equidad de género, cobertura educativa y percepción de la corrupción. El coordinador de Proyectos del CEEM detalló que los atributos que deben cubrir los estados para alcanzar niveles idóneos de competitividad según e IMCO tienen que atender mediante varias pautas que ayuden a nivelar las diferencias y generar mejores oportunidades en las regiones peor calificadas. En primer lugar, dijo, es importante contar con economías estatales robustas, sólidas en sus cadenas de valor industrial y vinculadas a los mercados mundiales. Además de ello, Gil Corona ponderó que es clave disponer de contextos locales propicios para el desarrollo basados en la certidumbre jurídica, estabilidad política y progreso social. Adicional, señala que para mejorar la competitividad y la atracción de inversiones se necesita conformar gobiernos competentes en la administración de la hacienda pública estatal. Bajo este panorama, aseguró que “los 16 estados no idóneos en competitividad requerirán superar retos coyunturales y estructurales en esta dirección en las próximas décadas”, infiriendo que se trata en la mayoría de los casos de temas que se tienen tratar de forma transexenal y durante varias administraciones para ver cambios realmente notables y un emparejamiento entre las diversas zonas; “una mayúscula tarea de los estados y el país para elevar la competitividad”.