Redacción / La Voz de Michoacán Ciudad de México. América Latina y el Caribe es una región fuertemente golpeada por la pandemia de la COVID-19 y eso ha elevado la pobreza extrema, lo que supone un riesgo para la seguridad alimentaria, aunado a los riesgos provenientes de interrupciones en las cadenas de abasto, advirtieron la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). “La región fue fuertemente golpeada por la crisis de la pandemia en 2020 y hubo una contracción del Producto Interno Bruto (PIB) per cápita de hasta 8.4 por ciento en algunas zonas de la región. Esto conllevó a que la pobreza extrema se incrementara en alrededor de 16 millones de personas y eso claramente supone un riesgo para la seguridad alimentaria”, refirió el Economista de la FAO, Sergio René Araujo. Durante la presentación del documento “OCDE- FAO: Perspectivas Agrícolas 2021-2030”, señaló que las expectativas para América Latina y el Caribe apuntan a que en la próxima década, el PIB per cápita aumente, en promedio, 1.5 por ciento al año. El economista de la FAO resaltó que esto es importante porque los gastos en alimentos representan alrededor de 13 por ciento de los ingresos de los hogares, lo que supone un alto riesgo ante fluctuaciones en los precios de los alimentos y las variables macroeconómicas, como el tipo de cambio. “Muchos países importan cantidades considerables de cereales o de oleaginosas que pueden tener un impacto negativo o positivo en su balanza comercial, correspondiente con los movimientos en los tipos de cambio”, señaló. “El sector agrícola en la región ha mostrado resiliencia a las interrupciones en las cadenas de abasto que se han suscitado en otros sectores y alrededor del mundo; sin embargo, esto no significa que esté exento de sufrir algunos efectos, ya que diversos materiales, como fertilizantes o piezas que se utilizan como reemplazo en la maquinaria de la agroindustria también se pueden ver afectados por estas interrupciones en las cadenas de abasto”, advirtió Araujo. Apuntó que esto cobra relevancia porque la región es un importante productor y exportador de productos agropecuarios a nivel mundial, pues representa alrededor de 13 por ciento del valor mundial de la producción agrícola y 17 por ciento de las exportaciones del sector agropecuario. En este contexto, el comercio seguirá siendo un importante factor que contribuya a la expansión de los productos agrícolas, debido a las exportaciones, especialmente a China; además, América Latina y el Caribe es un importante socio comercial para Estados Unidos y la Unión Europea.