Maricruz Rios / La Voz de Michoacán Con el apoyo de diez empresas y la actuación coordinada de diversas dependencias, el gobierno estatal puso en marcha el programa Michoacán sin Carestía, con el objetivo de lograr contener la escalada de precios en la entidad, que ya alcanza una tasa de inflación del 10.47 por ciento anualizada. De acuerdo con el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) que elabora quincenalmente el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), Michoacán es la entidad con la tasa de inflación más alta, reflejo principalmente de escaladas continuas en los precios de productos alimenticios y básicos para el hogar. El estado se ubica incluso muy por encima de la media nacional de inflación de 8.70 por ciento, de ahí la necesidad de cerrar un pacto que pretende garantizar no sólo “estacionar” los precios, sino garantizar temas de abasto alimentario y apoyo a productores agrícolas. Durante un encuentro con medios, el encargado de Despacho de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco), Rubén Medina González, dio a conocer que este acuerdo de colaboración tendrá una vigencia de seis meses. “Ante una contexto mundial complejo, Michoacán no puede quedarse al margen”, reconoció el funcionario en torno a la necesidad de activar algún mecanismo que pueda contener esta alza que ubica a nuestro estado entre los más caros del país desde abril pasado. “Como ha sido en otros temas, estamos haciendo un trabajo muy armonioso con el gobierno federal, es por eso que están aquí Segalmex, Liconsa y Diconsa, instituciones que tienen mucho que ver con la economía familiar”, refirió Rubén Medina. Además de las tres dependencias federales mencionadas y la Sedeco, detalló que participan en este esfuerzo coordinado también la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) estatal, el sistema DIF, la Profeco y el Despacho del Gobernador, así como Fábrica de Jabón La Corona, Abarrotes Azteca, Arrovama, Abarrotes La Violeta, Harinera Monarca, Grupo Bafar, SuKarne, Merza, Parhikune y Tron Hermanos de lado del empresariado. Confirmó que el esquema regional está alineado al Paquete contra la Inflación y la Carestía (Pacic) del Gobierno de la República, si bien no entró en detalles sobre sus resultados, los cuales han sido prácticamente nulos desde que se puso en marcha y todos los productos “blindados” han resentido aumentos de precios mayores a la tasa de inflación general. Soberanía alimentaria y distribución de mercancías Uno de los vértices de Michoacán sin Carestía es el aumento en la producción agrícola; “vamos a estar trabajando en tres productos esenciales que son maíz, arroz y lenteja, que aparte Michoacán es líder en estos granos”, desglosó Rubén Medina, agregando que se trata no sólo de nuevas inversiones sino de potenciar las ya existentes. Este esquema de apoyo al campo incluye entrega de fertilizantes, composta y acompañamiento en manejo agroecológico, en la apuesta de mejorar la calidad de la producción y el rendimiento por hectárea. El Gobierno de Michoacán adelantó también la compra emergente 3 mil toneladas de maíz por parte de Segalmex para 150 tortillerías y almacenaje en silos estatales para un tema de reserva estratégica, junto a la confirmación de precios de garantía para los productores. Para amarrar la distribución de alimentos y mercancías, el gobierno se comprometió a no incrementar las cuotas de transporte público y peaje en carreteras de concesiones estatales, “que también tiene mucho que ver con continuar siendo un lugar atractivo de inversiones, en este caso con estrategias de seguridad para garantizar la logística de distribución hasta los centros de producción a los puntos de consumo”, por lo que se adicionó que mantendrán un monitoreo para tener las vías libres. Se suman esquemas de seguridad alimentaria para grupos vulnerables, ejemplificadas principalmente en las dotaciones alimentarias y comedores comunitarios del DIF, así como desayunos y comidas en las Escuelas de Tiempo Completo. El abasto alimentario se redondea con los más de 205 mil beneficiarios de las tiendas Linconsa y Diconsa, que continuarán ofreciendo leche y productos básicos a costos prácticamente simbólicos. Finalmente, expuso Rubén Medina que entra la participación del sector privado mediante acuerdos firmados con el gobierno estatal para fijar precios máximos en productos de la canasta básica. La autoridad, por su parte, mantendrá monitoreo de precios estos productos, así como tortilla y gasolinas.