Maricruz Rios / La Voz de Mihoacán Morelia, Michoacán. El consumo local no sólo promueve y detona los negocios de tu comunidad, sino que representa varias ventajas para mantener un ecosistema financiero más justo e incluso puede ayudar al medioambiente al acotar el uso de energía y esfuerzos logísticos para el transporte de mercancía. De acuerdo con el despacho de mercadotecnia Merkatua, en una era de marcado consumismo es momento de detenernos a reflexionar sobre lo importante de apoyar a los canales de venta y distribución locales, que no sólo ayudan en gran medida a mantener diversas fuentes de empleo, sino que consiste en sí mismo en un ejercicio que nos ayuda a realizar compras y consumo de manera más inteligente. En primer lugar, el consumo local ayuda a volver más competitivos a los pequeños negocios, lo que a su vez ayuda a que la gente de nuestra comunidad tenga una forma digna de ganarse la vida, se generan más empleos en la zona y se evita, de paso, que los grandes corporativos controlen el consumo. De acuerdo con Merkatua, comprar en locales de tu comunidad te da aparte la certeza de saber a dónde va el dinero y qué familias y personas se están beneficiando de las cadenas de consumo y producción. Además, el consumo de productos elaborados de manera local favorece el ahorro de combustibles y disminuye la utilización de energía. Al ser mercados locales los esfuerzos logísticos son menores en transportación de mercancías, lo que indirectamente favorece al medioambiente de tu región. Comprar productos y consumir servicios locales también detona la creatividad y los ánimos de emprender de la gente de nuestra comunidad. Consumiendo local ayudas a que la sociedad se enriquezca de personas realizadas, creativas, innovadoras y necesidades satisfechas, refiere el despacho de mercadotecnia. Hay que tomar en cuenta también que esto también puede servir para la preservación de tradiciones, oficios, profesiones y la cultura de nuestro lugar de residencia. Productos y alimentos típicos de una región sólo seguirán existiendo si hay un mercado que los consume, y los primeros consumidores pueden ser los mismos vecinos de la zona. Finalmente, el consumo local fortalece las relaciones de los mismos integrantes de la comunidad. Este tipo de locales generalmente tienen atención personalizada, conocen a sus clientes y forman un ‘ecosistema’ funcional. Esto ayuda fomentar las buenas relaciones, existe una relación más cerca que la de vendedor y cliente, la gente se siente valorada en ambos sentidos y consideran que su trabajo no sólo les da una forma de subsistir, sino que es valorado como útil. Esta confianza, además, puede ayudar a regular con más facilidad el uso de buenas prácticas de producción, venta y comercialización. Al final, la mejor de forma promover el consumo local es a través de nuestras propias decisiones de compra.