Si tu pyme está dando sus primeros pasos y has tomado la decisión de manejar el aspecto contable de la misma, ¡guarda la calma! Sabemos que el mar de información acerca de los requisitos fiscales que se deben cumplir y todo lo relacionado con el SAT puede llegar a ser intimidante, pero a medida que vayas adentrándote en estos temas y te alíes con las herramientas correctas, te darás cuenta de que no hay nada que temer. En breve, te contaremos las cosas generales de las que debes estar enterado para que la contabilidad de tu negocio no se vea en crisis, además, ahondaremos particularmente en lo concerniente a la facturación y en cómo la tecnología te puede echar una mano. ¿Vamos? Las obligaciones fiscales de tu pequeña empresa Inscripción en el Registro Federal de Contribuyentes Manejo de la contabilidad del negocio con total transparencia Asegurarte de que toda la información que proveas sea válida y se encuentre 100% actualizada Compromiso al realizar las declaraciones correspondientes Facturación electrónica de acuerdo a lineamientos establecidos Pago puntual de impuestos En cuanto a este último punto, hay que tomar tres en consideración: el Impuesto al Valor Agregado (IVA), el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS). Si tienes trabajadores, a lo anterior deberás añadir el ISR retenido por salarios, la retención de IVA y un 10 % de PTU. El papel de la facturación en tu pyme Ya que se ha abordado lo general, es hora de entrar en materia. No importa de qué tamaño sea tu empresa, facturar es algo inevitable. El CFDI o Comprobante Fiscal Digital por Internet, contiene información sobre una transacción realizada, como la fecha, los costos, los impuestos, etc.; en su versión 4.0, exige más detalles de los contribuyentes con el objetivo de agilizar el proceso de facturación y que se realice de manera más sencilla. No obstante, varios de los cambios que trajo consigo la mencionada versión 4.0, ocasionaron un incremento en los errores cometidos al momento de facturar, por ello, la tecnología ha llegado para convertirse en un socio estratégico de quienes aún lidian con este requisito fiscal. Tecnología y facturación: ¿qué opciones hay para tu pequeña empresa? Actualmente, los sistemas para facturar son la mejor alternativa para supervisar los movimientos financieros de tu negocio en donde sea que te encuentres y al momento que lo desees; lo único que requerirás es una computadora con acceso a internet. Entre los otros beneficios que también te brinda la herramienta mencionada, están la creación, emisión y recepción de facturas digitales en cuestión de minutos. Además, no tendrás que preocuparte del ingreso de datos erróneos, ya que el software se encargará de esa labor a través de sus procesos automatizados, de modo que te quitarás de encima el miedo a que un error como una letra de más o de menos, sea motivo de una sanción por parte del SAT. Por cierto, a la hora de elegir un programa para facturar, asegúrate de que sea un Proveedor Autorizado de Certificación (PAC) por el SAT, así no dudarás de la validez de tus facturas. Y, claro, la seguridad es otro elemento que no queda fuera de la jugada, pues al tratarse de información tan sensible, las medidas que se implementan para protegerla suelen ser infalibles y eficaces para que nadie se atreva a vulnerar los datos ingresados. ¡Haz despegar tu empresa con un programa de facturación! El cumplimiento de tus obligaciones fiscales ya no tiene por qué verse como una tortura, deja que la tecnología te respalde y respira tranquilo cuando de facturación electrónica se trate.