Michoacán brinca de la posición 26 hasta la 7 en ranking industrial; serviría a la recuperación financiera

Repunte en el sector de manufacturas amortiguó caída general del sector y posiciona mejor a la entidad a nivel nacional.

Foto: Twitter.

Maricruz Rios / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. Si bien la actividad industrial en general volvió a manifestar una tendencia negativa con una caída del 4.6 por ciento, explicada en buena medida por la contingencia sanitaria debido al coronavirus, la actividad manufacturera presentó un importante repunte durante el primer cuatrimestre del año, lo que permitió a la entidad no sólo contener la debacle productiva a raíz de la pandemia, sino brincar de la posición 26 hasta la 7 en cuanto a la actividad industrial a nivel nacional se refiere.

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De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en específico dentro de la industria el ramo de la manufactura creció un 5.4 por ciento entre enero y abril pasados, por lo que se anticipa que en la reapertura de la actividad económica sirva como ancla que “arrastre” con buena parte de la recuperación financiera en Michoacán.

El crecimiento del sector manufacturero fue tan importante que amortiguó marcadas caídas en otras actividades dentro de las actividades secundarias (industriales), como la construcción, que se desplomó 24.3 por ciento; industria minera, que reportó una caída del 10.8 por ciento y la generación en cadena de energía eléctrica, agua y gas, que declinó su comportamiento del 6 al 0.2 por ciento de crecimiento durante los primeros cuatrimestres de 2019 y 2020. El año pasado la caída general de las actividades industriales en el primer cuatrimestre del año fue de 3.3 por ciento.

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De acuerdo con Heliodoro Gil Corona, investigador de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), la crisis económica la han resentido con mayor estruendo los estados con estructuras industriales más fuertes, pero no deja de sorprender el caso michoacano, que ha podido lograr cierta estabilidad gracias al empuje de la actividad manufacturera, aún dentro del contexto de contingencia que se ha atravesado.

En este escenario de calamidades que experimenta el sector industrial de México, Michoacán presenta particularidades en el desempeño de sus actividades secundarias, que merece no perder de vista”, señala el economista nicolaita.

Es indiscutible que la tendencia de contracción industrial que se trae desde principios de 2019, así como el tema de la pandemia de COVID-19 han incidido de manera adversa en el tejido productivo industrial, refiere Heliodoro Gil, no obstante, el sector industrial, de la mano de sus manufacturas, ha encontrado espacio para descender menos, buscar más ágilmente salir de la problemática y, de paso brincar casi 20 lugares en el ranking nacional de actividades secundarias.

En el análisis detallado de las actividades industriales de Michoacán, se puede establecer que la recuperación de las actividades manufactureras fueron clave para evitar una caída brusca en este sector económico”, afirma el investigador. Y es que de haber descendido 6.4 por ciento durante el primer cuatrimestre de 2019, para este año, con todo y la contingencia sanitaria, el sector manufacturero creció 5.4 por ciento y jaló lo suficiente al resto de actividades secundarias para que la caída general en industria se amortiguara.

No obstante, el también especialista del Colegio de Economistas del Estado de Michoacán (CEEM) reflexiona que es necesario incentivar y no descuidar los ramos donde sí hubo caídas, tanto para para poder aminorar el impacto de las mismas como para detonar inversión y proyectos que permitan darle la vuelta al escenario.

Las cifras de abril ya fueron negativas y seguramente se mantendrán al menos hasta el mes de junio, por lo que “desde luego que el desempeño del resto de ramas industriales llama la atención y preocupa”, comenta el académico nicolaita.

Destaca en el reporte del INEGI que, en el balance en el lapso de enero de 2019 a marzo de 2020, las actividades industriales totales reportaron 12 meses de decrementos en sus tasas anualizadas a excepción, precisamente, de las manufacturas, donde, tal como señala Heliodoro Gil Corona, “los desempeños no fueron tan desastrosos”. Las manufacturas de abril de 2019 a marzo de 2020 observaron 11 meses de tasas positivas, y no fue hasta abril pasado, ya con el parón generalizado de actividades por la contingencia, que se registró un descenso.

El tema, concluye el economista, es que las contracciones en el sector secundario tienden a debilitar las cadenas de valor del sector industrial y sus ecosistemas, reduce el valor global de las economías locales, debilita la estructura productiva de los estados y anula los empleos mejor remunerados. Por ello la necesidad de seguir apostando en detonar y diversificar el valor agregado y la industria en Michoacán, aún dentro de un contexto de pandemia, pues no obstante el respiro de las manufacturas, “el comportamiento industrial en Michoacán tiene rato sin reponerse, de manera que la contracción que prevalece en el país lo sitúa en condiciones críticas y de difícil recuperación en el corto plazo”.