Maricruz Rios / La Voz de Michoacán El tóxico no es el crédito, sino que puede ser tu manera de gastar. La Condusef refiere que el crédito es una de las herramientas financieras más útiles que existe para la compra de bienes de alto valor, así como hacer rendir el gasto familiar, sin embargo, es su mal uso lo que suele satanizarlo. De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), el crédito facilita la compra de bienes como automóviles, viviendas o incluso el financiamiento de viajes, todo bajo el compromiso de pagar una cantidad prestada en un plazo determinado y con intereses. Sin embargo, el mal manejo del crédito ha generado la percepción de que es una opción riesgosa, pero en realidad, su uso adecuado puede generar muchos beneficios. La agencia federal destaca que el crédito permite hacer rendir el gasto familiar, siempre y cuando se maneje de manera responsable. Un aspecto clave para lograrlo es conocer la capacidad de endeudamiento. Este cálculo es fundamental para evitar comprometer las finanzas personales y tener capacidad de pago. Para calcular la capacidad de endeudamiento, la Condusef recomienda seguir un proceso sencillo. Primero, se deben sumar los ingresos mensuales totales de la persona o familia. Luego, se deben restar los gastos regulares, tales como alimentación, renta, transporte y otros servicios. El resultado de esta resta representa el dinero disponible, y la regla general indica que no se debe comprometer más del 35 o 40% de este monto en deudas Además, es importante elegir el tipo de crédito que mejor se ajuste a las necesidades y posibilidades de cada persona. En el mercado existen diversas opciones de financiamiento, desde tarjetas hasta préstamos hipotecarios o personales. Cada uno de estos productos tiene características y condiciones diferentes, por lo que la Condusef sugiere comparar las tasas de interés, comisiones y plazos de pago antes de tomar una decisión. El uso adecuado del crédito también implica ser consciente de los pagos que deben realizarse puntualmente. No hacerlo puede resultar en el cobro de intereses moratorios y comisiones adicionales que, a largo plazo, incrementarán la deuda total. Un historial de pagos atrasados puede afectar negativamente el reporte de crédito del consumidor, lo que dificultará la obtención de futuros créditos en mejores condiciones. La Comisión subraya la importancia de pagar puntualmente y, si es posible, abonar más del mínimo requerido para reducir el tiempo de endeudamiento y los intereses acumulados. En cuanto a las tarjetas de crédito, uno de los productos más comunes, la Condusef recuerda que su mal empleo puede convertirse en una trampa financiera. Las tarjetas ofrecen la ventaja de financiar compras a corto plazo, pero si no se usan con moderación, los intereses pueden acumularse rápidamente. Un error común es pensar en la tarjeta de crédito como una extensión del ingreso mensual, lo cual puede llevar a una espiral de deuda difícil de controlar. Para evitarlo, es recomendable utilizar la tarjeta solo para compras necesarias y dentro del presupuesto calculado. La Condusef también recomienda evitar el uso de la tarjeta de crédito para financiar gastos cotidianos como alimentos o transporte, ya que esto puede resultar en una deuda constante y difícil de liquidar.