Redacción / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. El lamentable fallecimiento del Rey Pelé nos trae a la memoria su paso por el cine en la década de los 80, y de qué otra forma iba a ser si no haciendo lo que mejor sabía: jugar futbol. Hablamos de “Victory”, conocida en América Latina como Escape a la victoria”, una cinta de 1981 en la que participaron el astro argentino Osvaldo Ardiles, el los actores Sylvester Stallone y Michael Caine, y claro, el mismísimo Edson Arantes do Nascimento, Pelé. En aquella época, Ardiles venía de salir Campeón del Mundo con Argentina en 1978 y, puntualmente en 1981, brillaba en el equipo al que acaba de llegar Cuti Romero y donde es ídolo, el Tottenham inglés. Pelé, por su parte, se había despedido del futbol cuatro años antes, en 1977, ante unos 77 mil espectadores en el estadio del Cosmos de los Estados Unidos. En tanto que Stallone era una las megaestrellas de Hollywood del momento: había filmado la primera parte de “Rocky” y había ganado el Oscar como Mejor Actor y también por escribir el Mejor Guion de la película de Balboa. Después de “Escape a la victoria” saldría con la segunda entrega del boxeador más recordado de la pantalla grande en todos los tiempos. El director de la película protagonizada por Stallone, Ardiles, Pelé y Michael Caine fue John Huston y, a diferencia de la historia original, decidió ambientarla en Francia, antes de la caída del nazismo. El argumento es conocido: el oficial alemán Von Steiner (interpretado por otra estrella, Max von Sydow) visita un campo de prisioneros y ve a unos reos jugando futbol, entonces recuerda sus momentos como jugador, antes de la guerra, y decide organizar un encuentro entre una selección de futbolistas alemanes y los prisioneros, todos ellos soldados aliados. ¿Los nombres de los presidarios? John Colby (Michael Caine), Robert Hatch (Sylvester Stallone), Luis Fernandez (Pelé), Terry Brady (Bobby Moore) y Carlos Rey (Osvaldo Ardiles). Es un partido de vida o muerte. La película fue inspirada en "El partido de la muerte", un hecho que ocurrió en territorio de la ex Unión Soviética donde hoy es Ucrania, durante la Segunda Guerra Mundial. En los días de la ocupación nazi, un grupo de jugadores del Dynamo Kiev fueron obligados a trabajar en una panadería y jugaron algunos partidos contra equipos controlados por los oficiales alemanes que mandaban en el territorio soviético. Uno de los encuentros más recordados se disputó el 9 de agosto de 1942, en el Estadio del Zenit. El FC Start, con los ex Dinamo Kiev, jugó contra el Rukh de Alemania y la directiva era clara: si los soviéticos ganaban, podían ser ejecutados. Las cartas parecían estar echadas y los jugadores del Kiev no sólo golearon a los alemanes, sino que los humillaron. Una semana después se disputó la revancha: el FC Start volvió a ganarle al equipo regenteado por los nazis que ahora sí cumplieron con su advertencia y muchos de los jugadores terminaron torturados en un campo de concentración. Ese paso por el cine fue tan fuerte en la vida de Ardiles que, cada año, el ex director técnico de Racing y Huracán suele recordar las mejores anécdotas de la filmación. En una ocasión contó que hubo que filmar 34 veces la escena donde Stallone detuvo el penal de los nazis porque la escena resultaba poco creíble. La producción de la película había contratado al exarquero Gordon Banks para que ayudara a Stallone, que no sabía nada del futbol ni de atajar. Según cuentan, "Rocky" no siguió los consejos del ex guardameta de la selección inglesa y se dislocó el hombro en una volada. Un tiempo después, Sylvester Stallone reconoció que había subestimado un deporte que no conocía. "Antes de filmar pensaba: '¿Qué tan difícil puede ser jugar al futbol y patear una pelota?'. Estaba confiado en poder hacerlo sin entrenamiento. En un momento me pongo a hablar sobre esto con Pelé y me dice: 'Anda al arco. Voy a patearte un penal y te voy a decir a dónde va la pelota. Y no vas a poder atajarlo'". Stallone continuó: "Entonces voy al arco y él me dice a dónde va a ir la pelota. Pelé patea y yo trato de atajar, llego a tocar la pelota, pero me quiebra un dedo y termina siendo gol. Y es más, hasta rompió la red y terminó estrellándose contra la ventana de una casa que había atrás". En un aniversario de la película, Ardiles bromeó sobre la participación de Pelé en el partido que definía la película. “Jugó 8 minutos y se fue porque le estaban pegando. Jugamos 10 contra 11 todo el partido. Perdíamos 4 a 0 y cuando estábamos 4 a 4 dijo ‘I'm ok’ y entró de nuevo”. También contó que cuando llegaron a Budapest la figura del astro brasilero los eclipsaba: “Cuando llegamos al aeropuerto de Budapest estaban esperando como 5 mil personas. Fuimos al baño con Bobby Moore y cuando salimos ya no había más nadie. Ya habían visto a Pelé y se fueron todos”. Además de Ardiles y Pelé, en total hubo 17 jugadores en “Escape a la victoria”, entre los que estuvieron Bobby Moore, Paul van Himst y Kazimierz Deyna. Finalmente, a diferencia de la tristemente célebre historia del recordado "partido de la muerte", sobre el final de la película, Sylvester Stallone (que le había insistido al director en ser quien convertía el gol de la victoria) atajó un penal que provocó una invasión del campo y, como lo dijo Ossie Ardiles: "Escapamos al final". La película, filmada en Hungría, funcionó en la taquilla respecto de su presupuesto de 10 millones de dólares, al recaudar 27 millones. No quedó como una película memorable en la filmografía de Huston ni sirvió mucho para popularizar el futbol al norte del Río Grande, pese a la presencia de Pelé y de Stallone. Pese a ello, quedó como un relato citado a menudo por los fanáticos del futbol, que vieron a varios de los mejores jugadores de los 60, 70 y comienzos de los 80, liderados por el mítico Edson Arantes do Nascimento. Un film que ancla en la nostalgia. https://youtu.be/q_LPA8cqNX8